miércoles, 31 de mayo de 2017

Alimentación en base a frutas ¿buena o mala?

Mucho se habló de la dieta frugívora que llevaba el empresario informático Steve Jobs y se ha planteado la duda de los perjuicios que puede acarrear para la salud, el hacerla en forma estricta.

Los frugívoros consideran a las frutas como el alimento base. Ellos pueden llegar a consumir más de 300 gramos de frutos secos (almendras, nueces, avellanas, castañas, etcétera) y hasta un kilo de fruta fresca (alrededor de 6 a 7 frutas por día).

Con esta alimentación se pretende volver a lo que se considera la única alimentación natural (según algunos investigadores), la del hombre prehistórico, que era vegetariano pero que, en ese momento, no conocía el consumo de las legumbres y verduras.

Si se hace esta dieta estrictamente en nuestra sociedad, con la manera en que vivimos (con estrés laboral y emocional) y consumiendo los alimentos que no son sacados directamente de su fuente, es muy difícil que podamos cubrir los nutrientes que necesita el organismo.

Hay que tener cuidado con los problemas intestinales como la inflamación y el meteorismo que puede traer comer muchas frutas y frutos secos si no son consumidos correctamente. Además de estar atento de las alergias a las frutas secas, sobre todo a las nueces.

Hay gran diferencia con una persona que vivía en medio de la naturaleza, que sacaba los alimentos directamente del suelo o los árboles, donde el suelo era rico en nutrientes y no estaba contaminado y lo que comemos hoy. Ninguna forma de alimentación llevada al extremo es buena si uno no tiene el conocimiento y la conciencia suficiente como para llevar a cabo la alimentación con responsabilidad. A la hora de decidir lo que uno quiere comer, también tiene que tener en cuenta otros factores como la parte emocional, la actividad física y el estrés que consumen mucha cantidad de nutrientes y calorías.

Muchas personas que siguen esta alimentación no responsablemente pueden tener déficit de algunos nutrientes como la vitamina B 12 (la más difícil de reemplazar), hierro y calcio. Para muchas personas puede ser beneficioso incluir más fruta en su dieta, pero las autoridades sanitarias recomiendan consumir verdura, proteína magra, cereales integrales y productos lácteos, además de la fruta, para que una dieta sea equilibrada.

Los expertos en temas de salud no recomiendan el frugivorismo como estilo de vida sano

ni como dieta de adelgazamiento. Lo importante antes de empezar cualquier dieta es consultar un médico especialista.

martes, 30 de mayo de 2017

Industria del cuidado de la salud es impulsada por 2 ‘ingredientes’



El mayor interés por el cuidado del cuerpo y la necesidad de emprendedores que querían, en principio, solucionar un problema médico personal han impulsado en los últimos años el desarrollo de productos y servicios innovadores o tradicionales para la salud.

Emprendimientos para reducir el estrés laboral con ejercicios en horario de trabajo, masajes antiestrés en la oficina, alimentos sanos y deliciosos como los postres sin azúcar e iniciativas, principalmente, de venta de comida ecológica y balanceada son algunos de los negocios que ha permitido desarrollar esta nueva industria.

“Yo no puedo tener hijos hasta ahora. He peregrinado por todos y cada uno de los médicos de La Paz y Cochabamba con muchas entrevistas, diagnósticos, tratamientos y operaciones para tratar de embarazarme”, cuenta la abogada Mónica Céspedes, desarrolladora de las pastillas Nutragest, que la empresa Solnat vende en la sede de gobierno desde 2015.

Ese suplemento nutricional hecho a base de quinua, amaranto y otros productos naturales y ecológicos prepara a la mujer “para dar a luz y para la lactancia”.

Céspedes creó este producto de venta libre con la ayuda de profesionales en la materia y tras haber pasado 10 años de su vida investigando sobre todas las formas posibles para engendrar un hijo. “Vi cómo podía fortalecerme emocionalmente y encontré ciertas cosas que debía tomar para que mejore mi balance hormonal. Así logré un mejor conocimiento de algunos productos que beneficiaban” al cuerpo femenino, dice.

Otro caso es el de María Pia Giussani, una especialista en marketing y ventas que se convirtió en experta hornera a raíz de los problemas de digestión que tenían sus hijos y su exesposo y luego de que se percatara de que “las alergias al gluten” que tenían ellos se debían a que eran celiacos.

A diferencia de lo que sucede en otros países de la región, “vi que en Bolivia no había en general mucha información” sobre la intolerancia al gluten. “Así que investigué por mucho tiempo sobre esta condición y aprendí que se subsana con una dieta estricta”, recuerda Giussani, quien es hoy gerente propietaria de la panificadora paceña Cocina Sin Gluten.

“Desde 2012 empecé a elaborar pan con harinas alternativas” como la quinua, arroz, yuca, garbanzo, lenteja y otras muchas que hay en Bolivia. “También hice galletas y prepizzas. Me fue bastante bien”. Desde hace dos años “vendo mis productos en supermercados”, donde han tenido la “aceptación de varios clientes”, sostiene.

Una de las tantas iniciativas que nacieron en Santa Cruz por la necesidad de tener una “buena alimentación” es Natural Center.

“Desde hace tres años trabajamos con mi socia Yani Cuéllar —quien es nutricionista— en atender la necesidad que tienen las empresas de contar con comida más saludable”, indica Viviana Álvarez, administradora de empresas a cargo del servicio de catering, que ofrece dietas para bajar de peso “totalmente equilibradas” y en las que están incluidos todos los tipos de alimentos. La idea de tener un negocio de venta de comida saludable nació cuando el papá de Álvarez enfermó con cáncer y luego de que ella trabajara en un banco. “Eso de comer en pensiones daña la salud. Lo viví en carne propia. Mis compañeros de trabajo siempre estaban enfermitos por comer grasas y alimentos mal manipulados. Incluso vi que la mala alimentación les provocó operaciones”, recuerda.

“Cuando uno quiere un cambio de estilo de vida busca alimentarse mejor y eso ha generado una industria. Ahora todo el mundo quiere poner un catering saludable”, declara Mónica Barrera, nutricionista clínica y docente de la carrera de Nutrición y Dietética de la UMSA.

Interés. Alejandra Rojas, secretaria ejecutiva copropietaria del servicio paceño de catering “Como en casa”, expresa que la comida más saludable ha ganado más adeptos en los últimos años. “Al principio, en 2012, los pedidos de menús normales eran el 70% y los menús de dieta el 30%. Ahora, la relación es de 50-50”. El menú de dieta cuesta lo mismo que el normal, solo que no tiene aceite y carbohidratos, las carnes son a la plancha y viene acompañado de ensaladas, detalla.

Barrera se anima a decir que de cada 10 bolivianos “tres son los que buscan una vida saludable”, lo que está en función de la capacidad de ingresos económicos y niveles de educación de la persona.

Viviana Castillo, clienta de un servicio de catering desde diciembre del año pasado, menciona que decidió “comer sano” luego de que le diagnosticaron que sus niveles de azúcar y triglicéridos estaban altos. “Por eso cambié a un menú con ensaladas y proteínas. Cada día pago Bs 15 por el plato y me siento mejor”.

Sin embargo, Barrera recomienda tener “cuidado” al momento de optar por uno de estos servicios. “En nuestro país cualquier aficionado o profesional del arte culinario no es nutricionista y no puede hacer un plan de alimentación, porque esa no es su función. Hay que buscar los catering que estén administrados por profesionales del área” de nutrición y dietética, recomienda.

Otro de los nuevos productos para cuidar el cuerpo es el agua ionizada que se comercializa en La Paz, “única en Bolivia” por sus propiedades, según Cinda Obando, gerente de la empresa Ion Life, quien tras haber investigado sobre las propiedades del producto comenzó a consumir el líquido para combatir una enfermedad que la puso a un paso del cáncer.

“En unos meses me sentí mejor y la dolencia fue revertida (...). Es un agua que hidrata seis veces más que la tradicional” y que soluciona problemas de estreñimiento, desintoxica el organismo y ayuda a que trabaje mejor el páncreas, además de ser anticancerígeno y antioxidante, precisa la emprendedora con estudios en nutrición y medicina alternativa.

Carmen Castañeda, gerente del centro terapéutico y spa Casa Luna, inició también su negocio de tratamientos con biomagnetismo, reflexología, reiki y yoga para solucionar un problema que tenía en la columna, el cual fue en parte corregido gracias a estas prácticas. “Con este servicio se tratan especialmente el estrés, la depresión y la ansiedad (...). La gente muestra interés por estas terapias porque busca soluciones a sus problemas de salud, físicos, mentales y emocionales”, manifiesta.

Hay épocas del año, cuenta, en las que se incrementa el número de clientes. “Fin de año es una época de mucho movimiento porque la gente tiene muchas obligaciones económicas, sociales y laborales que cumplir. Pero siempre las personas tienen que visitar a su médicos, muchos de los cuales recomiendan estas terapias como complementos a sus tratamientos”, sostiene Castañeda.

Cinco errores sobre la dieta vegetariana


Estos cinco mitos se suelen repetir cuando se piensa en dieta vegetariana. En los casos en los que se opte por la dieta frugívora (frutas), macrobiótica (cereales) o vegana (solo alimentos vegetales), es necesario consultar con un nutricionista.

1. Los vegetarianos tienen siempre estilos de vida alternativos

Es incorrecto. Las dietas vegetarianas son adoptadas por miles de personas a lo largo de todo el mundo. Aunque al principio sí pudo estar unida a motivos éticos y de cambios en el estilo de vida, actualmente muchas personas que desean mejorar su estado de salud optan por una alimentación vegetariana.

2. Las dietas vegetarianas implican déficits nutricionales

Es falso. Toda dieta vegetariana bien planificada es saludable y nutricionalmente adecuada. Incluso las dietas vegetarianas pueden contribuir a una reducción en la incidencia de enfermedades crónicas, tales como la diabetes, la obesidad o el cáncer. Aun así, toda restricción dietética puede conllevar un riesgo de déficits nutricionales, si no se planifica de manera correcta. Una dieta ovolactovegetariana y vegana puede suponer un riesgo de déficit de vitamina B12, yodo y vitamina D, pero si la dieta está bien planificada y organizada no tiene por qué implicar ningún riesgo nutricional.

Patrones dietéticos vegetarianos más restrictivos (frugivorismo o macrobiótica) sí pueden generar más riesgos nutricionales. Por esta razón, es muy importante acudir a un dietista-nutricionista para planificar y organizar la dieta, si se desea llevar un estilo de alimentación vegetariano.

3. Las dietas vegetarianas no aportan suficientes proteínas

En realidad, las dietas que incluyen huevos y lácteos pueden cubrir sin problema las necesidades proteicas de adultos y niños. En el caso de dietas veganas, incorporar alimentos vegetales sustitutos de la proteína animal, como la soya (tofu, miso, tempeh y otros derivados), junto con alimentos como los cereales, legumbres y frutos secos combinados de manera correcta aseguran el aporte proteico de la dieta.

4. La dieta vegetariana no es buena en el embarazo

Una dieta vegetariana bien planificada es apta para todos los ciclos de vida, incluidos la gestación y la lactancia. El embarazo requiere controles analíticos que todas las mujeres -vegetarianas o no- deben realizar. Es probable que la mujer gestante vegetariana deba tomar durante el embarazo suplementos de vitamina B12 y ácido fólico, además de seguir los controles analíticos que le recomiende su ginecólogo.

5. La dieta vegetariana es siempre saludable

No es así. Una dieta vegetariana puede ser igual de desequilibrada nutricionalmente hablando que una dieta no vegetariana. Esto es así porque existen múltiples opciones de alimentos de origen vegetal ricos en grasas trans o grasas saturadas y azúcares, de manera que no siempre seguir una dieta vegetariana significa llevar una dieta saludable.

Muchas dietas vegetarianas pueden ser en exceso calóricas, ricas en grasas y azúcares, si se abusa de alimentos como galletas, bollería, preparados de sustitutos cárnicos ricos en grasas, cereales de desayuno azucarados, miel, azúcar y bebidas azucaradas, aceite, margarinas, helados y productos de aperitivo.

Nutrición en lactantes


Amamantar es la mejor forma de alimentar al bebé
Después del cordón umbilical, el seno es el mejor medio de contacto entre una madre y su hijo. Pero además de ofrecer ese contacto, la lactancia es el principal estimulante que le permitirá al bebé tener las herramientas necesarias para su crecimiento; por eso, es el alimento recomendado por los médicos.

A tomar en cuenta
Las prácticas óptimas de alimentación del lactante y del niño pequeño, se sitúan entre las intervenciones con mayor efectividad para mejorar la salud de la niñez. Para reducir el riesgo de infecciones en los bebés y para disminuir las probabilidades de cáncer de seno en la mamá, lo recomendable es amamantar durante seis meses.
La leche materna tiene cien ingredientes más que la leche de vaca. Es más fácil de asimilar para el inmaduro sistema digestivo del niño o niña, lo que también se traduce en menos posibilidades de sufrir cólicos, gases, estreñimiento, diarrea y salivación excesiva. No está dañada ni contaminada y muy pocos bebés suelen ser alérgicos a esta leche.
Las mujeres que amamantan son menos propensas a sufrir de osteoporosis

Alimentos peligrosos



Los alimentos comunes que consumimos a diario no están exentos de peligros como intoxicaciones, como es el caso de patatas, tomates o ciertas frutas, entre otros ejemplos. Lejos de lo que piensa la mayoría, existen alimentos habituales que entrañan peligros que a menudo únicamente se atribuyen, por error, a plantas, bayas u otros alimentos exóticos.

A tomar en cuenta
Uno de estos casos es el de las patatas con raíces. Se deben evitar estos ejemplares ya que suelen contener solanina, una sustancia altamente tóxica que puede llegar a provocar nauseas, vómitos, descomposición o incluso síntomas neurológicos como apatía, parálisis o alucinaciones.
Muchas de las frutas presentes en nuestra alimentación como peras, albaricoques o incluso manzanas también albergan ciertos peligros. El riesgo en este caso no procede de su estado o condiciones, sino de la parte carnosa de sus semillas, que contiene, aunque en dosis muy reducidas, un precursor del cianuro, veneno mortal para los humanos.

A comer uvas pasas


Una alimento disponible en cualquier época del año
Los beneficios de las pasas de uva incluyen alivio de estreñimiento, acidosis, anemia, fiebre y disfunción sexual. Las pasas de uva también se han conocido para ayudar en los intentos para subir el peso en forma saludable, así como su impacto positivo en la salud de los ojos, cuidado dental y calidad ósea.

Propiedades
Las pasas de uva son insustituibles como un miembro sano de la categoría de los frutos secos. Estas delicadezas doradas, verdes o negras son las favoritos de casi todos, especialmente a los niños. Las pasas de uva son ampliamente utilizadas en la cocina cultural alrededor del mundo (especialmente en postres) y también se agregan a tónicos de salud.
“Las pasas de uva son obtenidas por secar las uvas, en el sol o en los secadores, que convierte a las uvas en joyas doradas, verdes o negras. De hecho, cuando se consideran sus valores nutricionales y beneficios para la salud, estamos ante un gran alimento”, recomienda el nutricionista.
Las pasas de uva son ampliamente utilizadas en la cocina cultural.

viernes, 26 de mayo de 2017

Nutrición y maternidad



Cuando está embarazada, comer alimentos saludables es más importante que nunca. Usted necesita más proteínas, hierro, calcio y ácido fólico que antes del embarazo. Sin embargo, “comer para dos” no quiere decir que deba comer el doble, significa que los alimentos que consume son la principal fuente de nutrientes para su bebé.

A tomar en cuenta
Comidas sensatas y equilibradas serán la mejor opción para la madre y el hijo. Usted debe subir de peso gradualmente durante el embarazo, la mayor parte del peso la ganará en el último trimestre.
La mayoría de las mujeres necesitan 300 calorías diarias más durante al menos los últimos seis meses de embarazo, que lo que requerían antes de estar embarazadas. Pero no todas las calorías son iguales. Su bebé necesita alimentos sanos que estén llenos de nutrientes, no calorías vacías como las que se encuentran en los refrescos, dulces y postres.

Lo que importa no es la cantidad sino la calidad de la alimentación

jueves, 25 de mayo de 2017

Comer picante también tiene sus beneficios



Añadir condimentos picantes a la dieta, además de aportar suculentos aromas y sabores a la comida, también son beneficiosos para la salud si se consumen con moderación, según observa la responsable de salud y nutrición de Nestlé España, Anabel Aragón en el portal de EFE Salud.

En su opinión, los picantes han demostrado que tienen efectos beneficiosos como mejora de la digestión; también poseen propiedades antisépticas y antinflamatorias.



Su mecanismo de defensa

Las plantas picantes como pimientos, ajíes o el wasabi generan ese sabor como mecanismo de supervivencia, lo hacen para no agradar a los animales y defenderse así de sus depredadores.

La sustancia química característica de alimentos como chiles y pimientos es la capsaicina, un componente que da sensación de picor en cuanto contacta con la mucosa bucal.

En otras especias como la curcumina, la cúrcuma es quien tiene ese efecto y se usaba en la antigüedad para afecciones estomacales.


El wasabi es muy utilizado en la dieta japonesa. Tiene un sabor picante muy potente y un gran poder antibacteriano, por eso siempre se usa como acompañamiento de pescados crudos.

El 'temido' wasabi

En el caso del wasabi, su picor se debe a la presencia del isotiocianato, un compuesto químico que impide el crecimiento de microorganismos.

Se consume principalmente como acompañamiento de platos de pescado crudo, ya que es un alimento que puede conllevar una gran carga de microorganismos. En la cultura española, se recomienda siempre cocinarlos para evitar el riesgo de intoxicaciones.

“El uso de sustancias picantes como ajíes, pimientas, ajo o en este caso wasabi no solo aportan el toque culinario sino que también contribuyen a la seguridad alimentaria por el efecto que tienen sobre la carga microbiana en los alimentos”, concluye Aragón.

Nutrición escolar


Se debe asegurar el crecimiento y desarrollo del niño
El comienzo de la etapa escolar se da en el niño alrededor de los 3 años y cubre un periodo de tiempo que abarca hasta los 12 años. Esta etapa se caracteriza principalmente por una importante adquisición de conocimientos y por el desarrollo físico del niño.

A tomar en cuenta
Durante esta época el aprendizaje de unos buenos hábitos alimentarios será clave y determinará su comportamiento alimentario en la edad adulta. Prevenir entonces que adquieran unos malos hábitos alimentarios y mantener una buena alimentación es el mejor remedio para disminuir la incidencia de enfermedades no transmisibles.
También es importante tener en cuenta que el estilo de alimentación de los niños varía del patrón de alimentación de los adultos. Mientras que los adultos seguimos unos horarios establecidos para las comidas y tenemos claro, o deberíamos tenerlo, lo que debemos comer en cada momento, los niños tienen la capacidad de responder a señales internas de apetito y saciedad, de aquí a que cada comida que realiza el niño tenga unas características distintas.
La alimentación del escolar se basará en los hábitos saludables de la familia.

miércoles, 24 de mayo de 2017

Nutrición y dietas


Algunas dietas elevan los niveles de estrés, impidiendo continuar
Cuando el objetivo es disminuir de peso, regularmente las personas se someten a dietas que generan un gran desgaste por lo estrictas y restrictivas que son. Lo ideal es seguir un plan de alimentación que incluya todos los grupos de alimentos, porcionándolos y cuidando los métodos de cocción.

A tomar en cuenta
La clave para disminuir esos kilos de más de forma permanente es fijarse objetivos reales y a corto plazo, como por ejemplo disminuir 2 kg en 1 mes, eliminando la palabra “dieta” para evitar el estrés que genera y comenzando con cambios de hábitos para que permanezcan en nuestra vida.
La forma más óptima de lograrlo es comenzar a llevar una vida saludable, partiendo por pequeños cambios que van a contribuir a la disminución de peso, como por ejemplo cambiar el azúcar por endulzante, preparar snacks en base a verduras en vez de comida chatarra, cambiar las bebidas gasificadas por aguas saborizadas sin azúcar; entre otros.
Siempre es importante complementar con actividad física para que la ingesta de alimentos sea acorde a nuestro gasto energético.

martes, 23 de mayo de 2017

Las señales que alertan la sensibilidad al gluten

Cada vez son más las personas que tienen alergia al gluten, pero aún es difícil identificar la existencia de la sensibilidad debido a que los síntomas son distintos y se manifiestan en diferentes zonas. La nutricionista Claudia Abastoflor dijo a SALUD que las señales no se activan inmediatamente después de comerlo; el gluten tiene una naturaleza adictiva y no existe una prueba estándar.

Sin embargo, las personas sensibles al gluten deben estar atentas a los siguientes síntomas digestivos: reflujo, distensión abdominal, gases, flatulencia, síndrome de intestino irritable, diarrea, estreñimiento, dolor de estómago.

Otras personas experimentan síntomas en distintas áreas del cuerpo, tales como las infecciones frecuentes: virus, bacterias ya sea en los senos paranasales, vejiga, en el tracto urinario, piel u otra zona del cuerpo.

Otras molestias son dolores de cabeza, migrañas, molestias en las articulaciones y músculos, fibromialgia y dolor pélvico. Los síntomas neurológicos son mareos, sensación de hormigueo, entumecimiento y debilidad.

En lo emocional, confusión mental, disminución de la memoria, falta de concentración, ansiedad y depresión.

Claudia Abastoflor

Nutricionista

Es importante descubrir si se padece alergia al gluten para modificar los hábitos alimenticios.

Los resultados favorables de eliminar el gluten de la diera puede significar la pérdida de peso, recuperar la energía y liberarse del dolor y otros síntomas sin resolver.

También es importante para avanzar en objetivos, como tener hijos, emprender un proyecto que requiere concentración o simplemente disfrutar de la vida sin infecciones y la necesidad de medicamentos para aliviar todos los síntomas.

Otros problemas que se presentan son erupciones de la piel como urticaria, eczema, acné, rosácea, caspa y verrugas.

En los casos más serios se presentan enfermedades autoinmunitarios como lupus.

El aloe y la planta araña limpian el aire y desintoxican

Las plantas de interior pueden limpiar el aire y eliminar las toxinas de la casa. Es una técnica milenaria para mantener el equilibrio en los hogares y la salud.

Las plantas de aloe son muy beneficiosas para incrementar los niveles de oxígeno en el hogar. De acuerdo al portal lavidalucida.com, se ha comprobado que también absorben el dióxido y monóxido de carbono.

Una maceta con aloe vera es equivalente a nueve filtros de aire biológico.

Las plantas araña son capaces de realizar fotosíntesis bajo una iluminación mínima. Estas ayudan en la absorción de toxinas en el aire incluyendo formaldehído, monóxido de carbono y benceno.

Es capaz de filtrar con eficacia una sala de 200 pies cuadrados.

La hiedra inglesa es otra especie de interior que elimina las toxinas. Se ha demostrado que esta planta reduce el 60 por ciento de tóxicos en el aire y el 58 por ciento de los deshechos en el aire después de ser colocada en el hogar. Filtra el formaldehído, tricloroetileno y el benceno perjudicial.

La planta serpiente limpia el aire es casi indestructible. Si para comenzar se está buscando una planta fácil de cuidar, esta sería una buena opción para tenerla en casa.

Ayuda en la eliminación de toxinas del aire y requiere poca o casi ninguna iluminación, lo que facilita su cuidado.

Las plantas de goma o ficus elástico son excelentes en la eliminación de toxinas del aire. Requieren iluminación mínima y también son fáciles de cuidar. Es importante tener precaución son las hojas porque pueden ser tóxicas. Hay que tener cuidado si se tiene animales en casa.

Una alternativa es la orquídea. Esta variedad es capaz de cambiar el ambiente de las habitaciones, puede soportar incluso el aire acondicionado y pide pocos cuidados.

Una de las especies más comunes es la polilla, cuyas flores redondeadas varían desde el blanco, rosa, amarillo y morado. Funciona mejor en macetas de arcilla, ya que son porosas y drenan el agua. Deben ser cultivadas en sombra parcial, con iluminación indirecta. Se acomoda con facilidad a nuevos ambientes.

Cómo cuidarse a los 50 años



Tratamos los mejores hábitos de vida saludable con África López Illescas, médico del Consejo Superior de Deportes y profesora de la Universidad Alfonso X el Sabio (España), quien nos advierte que a partir de los 50 años debemos plantearnos ciertas cosas, como por ejemplo, empezar a estudiar los factores de riesgo cardiovasculares que tenemos.

“En nuestra salud va la genética, así como las acciones saludables que hemos realizado, entonces vemos que la edad cronológica no siempre coincide con la edad biológica”, señala la experta.

Conforme pasamos este ecuador de edad, se producen una serie de cambios fisiológicos como:

• La disminución del número de células

• Un déficit de oxidación

• Retención de radicales libres

Además, incrementa la degeneración de estructuras y función de los órganos como:

• El corazón

• Los músculos

• La piel

• El sistema osteoarticular

• Metabolismo

Comenta que a estos factores intrínsecos propios del envejecimiento paulatino, se unen otros factores extrínsecos como:

• Conductas psicosociales

• Estrés

• Sobrepeso

• Alimentación rica en ácidos grasos o sal

• Falta de ejercicio físico

• Enfermedades concomitantes

“A esta edad es frecuente que aparezcan las consecuencias del tabaquismo, la hipertensión, la diabetes o el colesterol alto. Si a esto le sumamos las características fenotípicas de cada uno que nos pueden hacer más propensos a padecer unas enfermedades que otras, pues se producirá un desgaste corporal importante e irreversible”, afirma la médico.

Comenta que la buena noticia es que “la ciencia epigenética puede cambiar en función de nuestra conducta”, por lo tanto, podemos actuar con estos factores de riesgo.

Diferencias entre hombres y mujeres:

Hay algunas diferencias en la mujer con la aparición de la menopausia, tiene que cuidar mucho más su metabolismo óseo por la osteoporosis o el metabolismo por los hidratos de carbono, la diabetes tipo 2, o la tendencia a incrementar la tensión arterial y su efecto sobre el corazón.

Es muy importante cuidar el estado de ánimo, acudir al médico para hacer un diagnóstico de depresión, que a veces se enmascara con los síntomas de la menopausia.

También es muy recomendable la prevención en cáncer de piel en todos los casos, el de mama en las mujeres y el de próstata y colon en los hombres.

Capacidad mental a partir de los 50

Depende mucho de la epigenética de la persona, es decir, de sus genes y su comportamiento, además también influyen las actividades a las que se han dedicado o se dedican.

“A partir de esta edad, hay una ligera disminución en el pensamiento y en la memoria y en la capacidad cognitva, no obstante, no se puede hablar de un menor rendimiento intelectual de forma general. Algunas capacidades intelectuales empeoran, pero otros mejoran, por ejemplo, en cuanto a memoria de asociación, la basada en experiencia, interpretación de emociones o en selección del foco de atención”, dicta África López Illescas.

Recomendaciones

Los cincuenta son un buen momento para ocuparse de la salud, antes de que aparezcan los achaques y las enfermedades; la doctora da unas recomendaciones básicas:

• Alimentarse de una manera saludable, nada de dietas locas.

• Hacer actividad física diariamente. Todos los días un poco beneficia, un solo día hacer mucho perjudica.

• Dormir de manera reparadora, cada uno lo que necesite.

• Hacer 15 minutos de mindfulness o relajación, lo más apropiado es hacerlo personalizado. Para ello, la mejor manera es valorar los factores de riesgo según los antecedentes familiares y el entorno.

La dieta vegetariana



Camilo Andrade Nutricionista
Una dieta vegetariana bien planeada puede aportar mayores beneficios
La dieta vegetariana es una opción elegida por millones personas en todo el mundo. Sin embargo, son muchos los mitos acerca de cuán saludable y nutritiva es ésta opción de alimentación.

Conociendo más
Existen muchos tipos de dietas vegetarianas y los límites dependen de las características de cada una. Los ovo-lacto-vegetarianos evitan carne, pescado y aves pero comen huevos y productos lácteos. Los lacto-vegetarianos no comen carne, pescado ni aves, pero consumen leche, queso y productos lácteos. Los veganos son vegetarianos estrictos que evitan comer todo producto animal.
Sin embargo hay que tener cuidado cuando se elige seguir una dieta vegan estricta ya que puede ser más difícil reemplazar ciertos nutrientes esenciales presentes en los lácteos, huevos y carnes. Al no estar presentes en la dieta algunos minerales como el hierro y el zinc o la vitamina B12 se suele acudir a suplementos vitamínicos.
Las dietas vegetarianas tienen todas las proteínas necesarias.

lunes, 22 de mayo de 2017

Revalorizar gastronomía permite mejor nutrición

La participación y capacitación de quienes son parte de los eventos gastronómicos y el propio turismo comunitario, es esencial para la Unidad de Turismo dependiente del Gobierno Municipal de El Alto, quienes tienen como reto el rescate y socialización de varios atractivos turísticos, que permiten a la ciudad una visión cultural de gran importancia.

Wilson Sangali pertenece a la comunidad de Milluni y es parte de las 13 personas capacitadas en la preparación de alimentos que serán presentados en la feria de la Llajua.

ALIMENTACIÓN

En la actualidad la comunidad de Milluni, si bien antes ya tenía conocimiento de la preparación de platos que incluyen carne de Llama, Trucha y Cordero, en la actualidad ellos fueron capacitados con la finalidad de conocer la cantidad de proteínas, carbohidratos y vitaminas que contienen estos alimentos para mejorar la nutrición, tanto de los hogares de Milluni, como la forma en que debe ser ofrecida al turismo interno y externo que visita este sector.

La organización de mujeres de Milluni, junto con su representante hoy se reunirá con la Unidad de Turismo, con la finalidad de definir su participación en la próxima feria de la Llajua, donde posiblemente las 13 mujeres capacitadas podrían ser parte del dicho evento.

“Eso es importante, saber cómo se deben consumir estos alimentos típicos, por ejemplo del sector, donde si bien antes incluía solo carbohidratos, en la actualidad permite tener otros productos que equilibren la alimentación”, explicó Sangali.

El proceso de capacitación y revalorización del turismo en El Alto, incluye a las nuevas generaciones, quienes deben no solo conocer los factores que favorecen a la gastronomía y el turismo alteño, sino convertirse en los reeducadores de la sociedad, con el propósito de evitar contaminación del medioambiente y el rescate de atractivos urbanos.

Cerca de 300 alumnos participaron del proceso en la unidad Educativa Modesto Omiste de Ciudad Satélite de acuerdo con director del establecimiento educativo profesor Esteban Salinas, quienes el 2016 hicieron un video.

miércoles, 17 de mayo de 2017

Qué comer de noche


Lo aconsejable es comer verduras y proteínas, nada pesado
Si eres una de esas personas que no puede comer antes de las 20 horas porque trabajas hasta tarde o porque vas al gimnasio, te damos unas opciones saludables para que no te vayas a dormir con hambre.

A tomar atención
Son muchos los que llegan tarde a sus casas porque tienen jornadas laborales muy largas, o bien porque hacen ejercicio al final del día. Esta “extensión” de la jornada hace que muchos tengan que atrasar sus horarios de comida, y por lo mismo, en las noches llegan a sus casas agotados y con ganas de comer cualquier cosa.
El nutricionista Camilo Andrade explica que si bien, muchos especialistas recomiendan que la última comida debe ser no más allá de las 20 horas, ésta es una regla que puede romperse, empero resalta que si alguien quiere “mantener o bajar su peso, debe ingerir comidas altas en verduras y proteínas, evitando carbohidratos y frutas en la noche”.
Comer en la noche favorece la acumulación de grasas durante el descanso

martes, 16 de mayo de 2017

¿Es dañina la soda?

Procura ir dejando poco a poco las gaseosas
La discusión por las bebidas azucaradas y con gas es algo de nunca terminar. Se sabe que las gaseosas contienen un contenido mayor de azúcar del que necesita el ser humano por día. Si se toma de un solo trago y rápido, puede generar hipo o indigestión. ¿Pero si se bebe con moderación? ¿Hace mal al estómago?

Análisis nutricional
Según precisó el nutricionista Camilo Andrade, si bien se sabe que los refrescos no son precisamente buenos, es posible que sea difícil resistirse. Su sabor dulce, el agradable burbujeo y el golpe de energía a veces parece ser justo lo que necesitas para acompañar tu cena, superar el bajón de la tarde o saciar tu sed en el cine.

“Ya sea que bebas un paquete completo al día o que bebas refresco de vez en cuando, reducir el consumo podría tener beneficios en tu peso y en tu salud en general. El mayor riesgo para quienes beben refresco regularmente es el exceso de calorías. Algunos estudios han demostrado que su consumo se relaciona con la caries y con la diabetes y parece que también es malo para tus huesos”, comenta.
Los refrescos libres de azúcar no tienen calorías, pero tampoco te hacen bien.

lunes, 15 de mayo de 2017

Estos alimentos nos hacen más listos



Una dieta variada y completa en ciertos nutrientes, como el omega-3 (salmón, sardinas o atún), contribuye a que el rendimiento intelectual de una persona sea mayor. Lo dicen los estudios, como el que llevó a cabo Alexandra Richardson, de la Universidad de Oxford. “Los ácidos grasos omega-3 son muy importantes para las funciones del cerebro, como también lo son otros nutrientes imprescindibles que hay que vigilar, como el hierro, el yodo y la vitamina B12, que interactúan en el desarrollo cognitivo y de los que, parte de la población, puede presentar carencias. Se ha visto, por ejemplo, que cuando las personas tienen una anemia ferropénica o niveles de yodo o de vitamina B12 muy bajos, acaban afectadas sus funciones neuronales, de concentración o de asimilación”, afirma la nutricionista Alma Palau, presidenta del Consejo General de Dietistas-Nutricionistas de España. El neurocientífico Fernando Gomez-Pinilla, catedrático de la Universidad de California, continúa: “Lo que tiene de especial el omega-3, particularmente un componente que se llama DHA, es que es parte de la estructura original del cerebro. Resulta que las membranas, que son como las capas externas de las células nerviosas, también están hechas de esa sustancia. No en su totalidad, pero en parte de su estructura sí tienen DHA, que es muy importante para muchas funciones cognitivas”.

Si usted ha eliminado el pescado de su dieta por razones éticas o espirituales, no se alarme, pues el deporte también funciona. "En las últimas investigaciones, hemos encontrado que, por ejemplo, el ejercicio físico ayuda al cerebro a robustecerse de omega-3 e incluso a formarlo a pesar de que no venga de la dieta”, explica el profesor Gomez-Pinilla. “Con ayuda de la actividad física se puede suplir esta carencia”, añade.

Brócoli y frutos rojos

Tal y como indican todos los expertos, cuando se trata de cuidar la dieta para una estupenda salud mental, usted debe echar mano de varios alimentos, no solo de uno por el hecho de que sea potente. Como aconseja el doctor y catedrático de la Universidad de California, hay que pensar en una dieta equilibrada. "Una frase que se usa en biología y neurología reza: 'Demasiado de una cosa buena es malo'. Hay muchos alimentos positivos, pero si uno exagera se transforman en negativos. Por eso, la mejor recomendación es el balance. Varios productos buenos y complementarios”, dice. Entonces, además del pescado, ¿qué alimentos nos pueden ayudar a leer a Joyce o Proust con ligereza?

El brócoli, pese a su lado oscuro, es la estrella de la vitamina K, junto con las coles de Bruselas y las verduras de hoja verde, y ha dado resultados muy positivos no solo en su ya conocida e indispensable función en la coagulación de la sangre, sino también en tratamientos para el Alzheimer. Una investigación de la Universidad de Montreal en Canadá demostró que las personas mayores que presentaban más presencia de vitamina K1 elaboraban mejores discursos, progresaban en su expresión verbal y poseían mayor retención de la información.

Las almendras y las nueces, por su parte, se llevan el galardón de alimentos hipercompletos. Ambas contienen precursores de omega-3, vitamina E y magnesio, que permiten mantener el nivel de concentración durante un tiempo sin que luego haya un bajón rápido, como podría suceder después de tomar un piscolabis con azúcar. Además, aportan gran cantidad de proteínas, que, entre otras cosas, estimulan las llamadas neuronas orexinas, que se encargan de mantenernos despiertos y atentos.

Algunos frutos rojos, como los arándanos y las fresas, son unos grandes aliados para aumentar la atención y fijar la memoria. Las pesquisas de la doctora e investigadora Elizabeth Devore, profesora de la Harvard Medical School en Boston, afirmaron que la ingesta constante de estas frutas ayuda a frenar la pérdida de memoria. Y las investigaciones del doctor Jeremy Spencer, de la Reading University en Inglaterra, constataron que los arándanos propiciaban la concentración durante varias horas, por lo que si usted estudia u oposita, súrtase de estos productos.

¿Chocolate para la agilidad mental? Con matices

Partimos de que “el cerebro es bastante plástico y flexible”, como apunta el neurocientífico, pero aun así, no es eterno, y con los años sufre un deterioro inevitable. “Tiene un nivel de consumo energético tremendamente alto, y casi todos estos procesos de producción de energía producen mucho estrés oxidativo”, explica el especialista. Es aquí donde aparece otro elemento importante en la dieta que debe tener en cuenta: los flavonoides, unos pigmentos naturales de los vegetales cuya capacidad como antioxidante libera y limpia el cerebro de toda esa oxidación a la que le sometemos solo por el mero hecho de funcionar. ¿Dónde encontrarlos? Las manzanas y los cítricos tienen una gran concentración de ellos, y las investigaciones, como la del profesor Adam Brickman, de la Universidad de Columbia en Nueva York, han descubierto que los flavonoides del chocolate negro poseen también un potencial revitalizante en cerebros ya desgastados por la edad. “El efecto es el mismo provenga de donde provenga, pero si hay que ponerle a un paciente una dieta más rica en flavonoides, no le diría que se atiborrara a chocolate negro”, matiza de forma simpática la nutricionista Palau. “Tendría que incorporar a su dieta manzanas, naranjas, uvas, té verde, bayas y frutas rojas, que son más saludables. Porque lo que hay que mirar siempre es el efecto final del contenido global de un alimento. Cuanto más completo y saludable sea en su totalidad, mejor”, aclara.

A estas alturas puede que su cerebro esté demandando una dosis extra de parte de estos súper nutrientes para seguir con la inteligencia a pleno rendimiento y poder acabar de leer el tema. Si es así, tome nota. Para cubrir las necesidades de hierro se recomienda incorporar a la dieta carnes rojas y vegetales verdes (especialmente, espinacas, muy ricas también en ácido fólico, que ayuda a frenar el deterioro cognitivo); para mantener óptimo el estado del yodo, basta con una cucharadita de sal yodada al día (la que se usa para cocinar), y en el caso de esa vitamina tan importante que es la B12, conviene consumir a diario un vaso de leche o dos, carne, pescado (preferiblemente azul), huevo, frutas y verduras. Si además lo combina todo, semanalmente, con cereales, legumbres, frutos secos y lácteos, ¡sin olvidar una abundante hidratación constante!, su cerebro irá a mil por hora. “Los estudios son claros respecto a que el que come mejor tiene una capacidad cerebral más alta que el que lleva una dieta pobre. Y, sobre todo, cuando se suma una actividad física regular”, concluye Gomez-Pinilla. Los niveles de atención que demandan ciertos deportes estimulan esta cualidad.

Wasabi, poderoso alimento antibacteriano



Hablamos del wasabi, un alimento muy utilizado en la dieta japonesa con un sabor picante muy potente pero sobre todo, con un gran poder antibacteriano, por ello siempre se utiliza como acompañamiento de pescados crudos. Hablamos de los beneficios y contraindicaciones de los productos picantes y comparamos la dieta japonesa con la mediterránea.

La responsable de salud y nutrición de Nestlé, Anabel Aragón, explica que el wasabi es un ingrediente muy común en la dieta japonesa que se utiliza especialmente para acompañar platos de pescado crudo como el sushi.

“Es una pasta de color verdoso con un aroma penetrante y un sabor picante que se obtiene de una raíz acuática. Pertenece a la familia del rábano y se comercializa mezclado con rábano picante, una especie más común y económica”, explica la especialista.

Comenta además, que al igual que ocurre en otras partes del mundo como México o la India, las sustancias picantes se utilizan además de su sabor, por su gran poder antibacteriano y antiséptico.

“El uso de sustancias picantes como guindillas, pimientas, ajo o en este caso wasabi no solo aportan el toque culinario sino que también contribuyen a la seguridad alimentaria por el efecto que tienen sobre la carga microbiana en los alimentos”, relata Aragón.

El wasabi se consume principalmente como acompañamiento de platos de pescado crudo, ya que es un alimento que puede conllevar una gran carga de microorganismos. En la cultura española, se recomienda siempre cocinarlos para evitar el riesgo de intoxicaciones.

Wasabi y picantes, efectos beneficiosos

“Los picantes han demostrado que tienen efectos beneficiosos como mejora de la digestión; también poseen propiedades antisépticas y antinflamatorias”, aclara la experta.

Las plantas picantes como pimientos, chiles o el wasabi generan ese sabor como mecanismo de supervivencia, lo hacen para no agradar a los animales y defenderse así de sus depredadores.

La sustancia química característica de alimentos como chiles y pimientos es la capsaicina, un componente que da sensación de picor en cuanto contacta con la mucosa bucal.

En otras especias como la curcumina, la cúrcuma es quien tiene este efecto y se usaba en la antigüedad para afecciones estomacales.

En el wasabi, su picor se debe a la presencia del isotiocianato, un compuesto químico que impide el crecimiento de microorganismos.

“Añadir condimentos picantes a la dieta, además de dar nuevos sabores, también es beneficioso para nuestra salud si se consumen con moderación”, dicta la especialista.

Mitos en torno a perjudicialidad

Anabel Aragón revela algunos mitos en torno a que el picante es perjudicial para la salud; los desvelamos:

• Provocan hemorroides: Es cierto que en algunos casos de hemorroides no es recomendable comer picantes ya que puede agravarlo, pero no es el responsable directo de esta alteración.

• Puede provocar gastritis: los médicos no recomiendan tomar alimentos picantes en estos casos porque pueden acentuar los síntomas aunque el picante no es el causante de ello.

• Provocan contracciones en mujeres embarazadas: No hay ningún estudio que demuestre la relación causa efecto entre el picante y un parto prematuro.

Dieta japonesa vs. mediterránea

Anabel asegura que la dieta tradicional japonesa y la dieta mediterránea tienen muchos aspectos comunes como su abundancia en frutas y hortalizas de temporada.

“Las algas en la japonesa, legumbres, cereales y gran cantidad de arroz se comparan con el consumo de trigo en de la mediterránea. Utilizan fuentes de proteínas animales como pescados, mariscos, huevos y el predominio de grasas saludables poliinsaturadas; en la mediterránea hay que añadir aceite de oliva, frutos secos, pescados y mariscos”, explica Anabel Aragón.

Ambas dietas tienen un uso culinario de los alimentos sencillo, con cocciones diversas y persiguen mantener las características sensoriales originales.

La esperanza de vida de los japoneses es la mayor del mundo, alcanzando en las mujeres los 87 años, justo seguidas por las españolas con los 85 años.

Los estudios científicos dicen que las personas que siguen este tipo de dietas además de ser más longevas, disminuyen la probabilidad de padecer enfermedades cardiovasculares.

Diferencias

“Desde el punto de vista del equilibrio energético, la dieta japonesa es muy rica en hidratos de carbono llegando casi al 65% de la energía, no alcanzando el 25% de las grasas; este aspecto es muy diferente a la dieta mediterránea porque las grasas en nuestra dieta alcanzan hasta un 40%, principalmente por el consumo de aceite de oliva“, aclara la nutricionista.

En ambos modelos, la presencia de ácidos grasos es alta pero, en la japonesa, su “fuente principal es el pescado”, mientras que en la mediterránea, además del pescado, están los “frutos secos y las semillas”.

Comida dañina



De un tiempo a esta parte, los términos alergia e intolerancia atribuidos a los alimentos se han instalado en nuestras vidas con total normalidad. Y la industria alimentaria ha entrado con todo en los supermercados ofreciendo soluciones. Solo en EEUU se vendieron, en 2015, productos libres de gluten por valor de 47.000 millones de dólares, casi el doble que cuatro años antes. Y un 30% de su población come gluten free cuando solo entre un 0,5% y un 1% lo necesita. Por otro lado, es verdad que las reacciones a determinadas comidas aumentan a buen ritmo.

Los productos destinados a personas con determinadas alergias o intolerancias alimentarias, que publicitan de forma llamativa precisamente lo que no contienen, copan las estanterías de muchos supermercados. Alimentos sin gluten, o aptos para celíacos, leche sin lactosa, cereales sin trigo, bebidas sustitutivas de la leche… En algunos, la lista de los componentes ausentes es casi más larga que los presentes.

Un ejemplo real: “Nata líquida para montar, sin lactosa, sin fructosa, sin huevo, sin soja, sin trigo, sin gluten y sin frutos secos”. Sin duda, en los últimos años la oferta ha ido in crescendo, lo que ha generado que ya existan cadenas concentradas en vender unos artículos, antes considerados nicho, para todos los públicos.

¿Qué está sucediendo? ¿Cada vez somos más alérgicos (o intolerantes) a ciertos alimentos? Según el Instituto de Investigación en Ciencias de la Salud del CSIC español, “la incidencia de las alergias alimentarias está creciendo rápidamente, con gran prevalencia en las sociedades occidentales y una amplia variedad de síntomas implicados. En Europa, entre un 1% y un 4% de adultos está diagnosticado así, y entre el 6% y el 8% de niños menores de tres años”, afirma Rosina López-Fandiño, al frente de este grupo. Pero hay más datos: en EEUU esa prevalencia en menores de 18 años ha aumentado en un 18%, y la alergia al maní se ha triplicado (del 0,4% a 1,4%) entre 1997 y 2008. También las anafilaxias, esas reacciones alérgicas graves que pueden suponer un riesgo de muerte, van a más en todo el mundo, según la Asociación Española de Personas con Alergia a Alimentos y Látex (AEPNAA), en especial entre niños y jóvenes. “Los ingresos por reacciones graves se han multiplicado por siete en los últimos 10 años”.

Vayamos por pasos. ¿Qué son las alergias y las intolerancias y en qué se diferencian? “Son dos reacciones adversas muy distintas”, indica López-Fandiño. “Los alimentos pueden producirlas desencadenando una variedad de síntomas que en ocasiones pueden ser severos. Mientras que muchas reacciones a los alimentos tienen un origen toxicológico, por lo que tendrían efecto en cualquier persona, otras dependen de la susceptibilidad individual. Si esa hipersensibilidad está mediada por un mecanismo inmunológico se denomina alergia, y si no, intolerancia”. Es muy distinto ser alérgico a la leche, en cuyo caso se experimenta una respuesta inmune frente a alguna o varias de las proteínas que contiene, que ser intolerante a la lactosa, que no se debe a ningún mecanismo inmunológico, sino a una deficiencia de la lactasa, la enzima encargada de la digestión de este azúcar, matiza la experta.

Para explicar ese boom de las reacciones adversas ante los alimentos hay que echar mano de un cóctel de causas combinadas. Sin duda, el componente genético es fundamental en las alergias, adelanta la investigadora. Si los padres o hermanos son alérgicos al maní, un niño tendrá siete veces más riesgo de serlo. “Pero ese aumento en la prevalencia sugiere una importante contribución de factores medioambientales relacionados con la dieta y la microbiota intestinal. Por otro lado, cada vez más estudios relacionan la obesidad, considerada un estado inflamatorio crónico que afecta a todo el organismo, con un mayor riesgo de afecciones alérgicas. Las dietas ricas en grasa provocan cambios en la mucosa intestinal y en la permeabilidad de las células epiteliales, que favorece la aparición de alergias”.

Las razones de que el aumento sea mucho más significativo en las sociedades más desarrolladas también son múltiples: además de que es donde más estudios se realizan, también sus ciudadanos ingieren mayor cantidad de alimentos procesados y ricos en grasas, y menores dosis de vitamina D cuya carencia es un posible detonante de alergias. Y, ojo, también es donde los humanos se someten a una higiene tan excesiva que puede debilitar el sistema inmune. Por ello se estima que una mayor exposición a agentes infecciosos y parásitos durante la infancia, como les sucede a los niños de países en vías desarrollo, los hace más resistentes a las alergias que los que cumplen con los estrictos hábitos de limpieza asociados al estilo de vida que se lleva en occidente.

Hay estudios que indican que la nutrición durante la gestación y la infancia también puede jugar un papel importante, en especial durante el primer año de vida, un asunto que, afirma López-Fandiño, es muy controvertido: “La creciente evidencia de que la sensibilización ante un determinado alimento puede generarse por vías diferentes a la gastrointestinal e, incluso, de que una exposición temprana a los alérgenos frecuentes por vía oral induce a una tolerancia más que a una sensibilización, está poniendo seriamente en cuestión las pautas actuales de introducción de alimentos durante el primer año de vida”.

En países donde se consume habitualmente maní, pero se evita dar a niños pequeños, como en EEUU, Reino Unido o Australia, la incidencia de la alergia a este fruto seco es mayor que en países en los que el consumo y la exposición también son altos, pero donde no se restringe su ingesta, como sucede en África o el sudeste asiático. “La hipótesis de que puede existir una ventana inmunológica, un periodo entre los primeros seis meses de vida durante el cual el organismo estaría predispuesto a la tolerancia, coge cada vez más fuerza”, explica esta experta, que menciona varias investigaciones en marcha que darán resultados en los próximos años.

viernes, 12 de mayo de 2017

¿Los fideos engordan?


Hidratos de carbono de absorción lenta que no engordan
La mayoría de las personas preocupadas por mantener un peso adecuado, intentan de manera equivoca alejarse de las pastas, pensando que éstas engordan o aumentan el peso corporal. Las pastas se elaboran a partir de harinas o sémolas que provienen del trigo duro mezclándolas con agua y algo de sal.

Aporte nutricional
El nutricionista Camilo Andrade explica que entre el 60 y el 70 %, los fideos están constituidos por hidratos de carbono de absorción lenta (almidón), el 12-13% son proteínas (glúten), y el aporte de grasas es casi nulo.

El aporte de vitaminas y minerales es relativamente bajo, excepto que éstas hayan sido enriquecidas. Esto se debe a que en la elaboración se utiliza el endospermo (parte intermedia de los granos rico en gluten y almidón), quedando los minerales en las capas externas del grano. “Aporta también algo de fibra vegetal, lo cual genera esa sensación de saciedad. Cuando añadimos quesos, natas, carnes, etc., el contenido graso y calórico se dispara”, detalla el nutricionista.
El valor calórico, como los demás nutrientes variarán en función de las salsas y acompañamientos de las pastas.

jueves, 11 de mayo de 2017

Cómo es la cena perfecta

A muchas personas les pasa, sobre todo a mujeres: La hora de llegar a casa después de trabajar se asocia a un momento de descargar ansiedad y recuperarse del esfuerzo realizado durante el día. Tanto si has hecho deporte a última hora como si vienes de un atasco o has tenido un ratito de estrés acostando niños, es importante tomar conciencia de que la cena puede ayudarte a mejorar el ánimo si es saludable, está elaborada con calma y contribuye a pasar un buen rato. En ese sentido, tan importante es elegir el qué cenar como de qué forma hacerlo. Ni tomarse un yogur de pie en la cocina, ni atiborrarse de comida basura es bueno para ti. La mejor cena es la que aporta un poco de todos los nutrientes, te permite disfrutar de ese último rato del día y te prepara para dormir a pierna suelta. Todo ello, sin perder la talla. Parece difícil, pero no lo es. Sigue los consejos de la dietista-nutricionista Victoria Fagúndez, máster en Obesidad, para preparar la mejor cena.

¿UN YOGUR PARA CENAR?

“¿Cenar un yogur con unos cereales integrales para mantener la línea? ¡Error!”, advierte Victoria Fagúndez. En la mayoría de los casos, esta opción supone una bomba de azúcares. Un yogur natural sólo debe llevar leche (entera o desnatada) y fermentos lácteos. Sin embargo, muchos de los que venden son realmente postres lácteos. Lo mismo ocurre con los cereales. Muy ricos en fibra, sí, pero con demasiado azúcar. No es una buena opción.

MUJER PREVISORA... NO COMERÁ POR DOS

Organiza un menú para las cenas de toda la semana y ve a la compra. “Eso te permitirá llegar a casa tranquila, tener los ingredientes listos y poder hacer una cena saludable de la que disfrutes”, recomienda Fagúndez.

UN FRUTERO COMO CENA

“Lo mejor es cenar fruta”. Pues no. Aunque se recomienda consumir entre dos y tres piezas al día, no es lo ideal dejarlas para la noche. Salvo el aguacate y el coco, la fruta tiene hidratos de carbono (en forma de fructosa), es rica en agua, vitaminas, minerales y fibra. Para ser una cena equilibrada, necesitaría el aporte de proteínas.

PIENSA ANTES DE ABRIR LA NEVERA

La hora de llegar a casa después de trabajar es mala para las personas que tienden a la ansiedad. Es importante, antes de lanzarse a comer cualquier cosa que quite el hambre, pensar, beber un vaso de agua o de caldo y planificar adecuadamente la cena.

¿Y PARA BEBER?

Agua. Se siente. Deja el vino y las cervezas para ocasiones especiales. El cuerpo hay que mantenerlo hidratarlo hasta el final del día.

SOPA PARA CENAR

Un buen consejo es basar la cena en alimentos de origen vegetal. Si tiendes a las digestiones pesadas, mejor en crema o puré.

DORMIR A PIERNA SUELTA

Evita las verduras que tienen efecto diurético -como los espárragos o las alcachofas- para evitar la interrupción del sueño, además de las crucíferas y cebollas que pueden producir incómodos gases o reflujos. Por otro lado, intenta no cocinar de forma complicada para evitar digestiones pesadas que estimulen el estado de vigilia, así como el uso de especias o condimentos fuertes y sustancias excitantes como el cacao, el té o el café.

CENAR PROTEÍNAS

Sí, pero no cualquiera. De las proteínas de origen animal lo bueno es que ayudan a las células musculares a regenerase durante las horas de descanso. Son buena idea huevos, carnes, pescados y mariscos magros.

Si prefieres proteínas de origen vegetal, opta por legumbres, cereales, frutos secos, semillas. ¿Las mejores? la soja, el garbanzo y algunas alubias, semillas como chía, frutos secos como los pistachos y cereales como la quinua, porque contienen todos los aminoácidos esenciales que nuestro organismo necesita.

NO CENES MUY TARDE

Y tampoco lo hagas deprisa. “Dedicar tiempo a cenar y tomárselo como un ritual para desconectar de la rutina te permite terminar el día de manera relajada”, concluye Fagúndez.

Nutrición y gestación



No hay que aumentar la cantidad sino la calidad de los alimentos
La alimentación es muy importante en un embarazo, y por nada del mundo debe tomarse a la ligera. Si estás actualmente esperando ser madre, no debes dejar de leer algunos consejos para llevar una buena alimentación.

Consejo útil
Cuando la mujer está embarazada, su cuerpo llega a presentar una gran variedad de cambios. Requerirá una mayor cantidad de calorías, así como una amplia cantidad de nutrientes para que el embarazo resulte con éxito. Todos esos cambios físicos pueden llegar a afectar seriamente a la madre, o al mismo bebé si ella no está lo suficientemente preparada.

“Es evidente que la mujer consumirá más energía, pero esto sólo es evidencia de que la madre debe adaptar su alimentación a una dieta de mejor calidad, y no necesariamente de mayor cantidad. En este punto, se le debe prestar mucho más atención al consumo de frutas y verduras, principalmente a los de hoja verde como por ejemplo la acelga, la lechuga, o la espinaca”, recomienda el nutricionista Camilo Andrade.
Lo más importante es llevar una dieta saludable y balanceada

martes, 9 de mayo de 2017

Manzanas rojas y verdes

Una fruta que no debe faltar en la mesa familiar
No podemos concluir en qué tipo de manzana es mejor en términos generales, sino que según el objetivo y el tipo de consumo que se haga la manzana verde será más beneficiosa que la manzana roja o viceversa.

Propiedades
El nutricionista Camilo Andrade explica que aunque hablemos de “manzanas” y dentro de esta gran familia existan miles de familiares… en realidad no son muchas las diferencias (al margen del color) que se pueden observar en unas y en otras.
“Sí es cierto que su composición nutricional es algo diferente, pues: las manzanas rojas tienen más azúcar que las manzanas verdes, las manzanas rojas son más indicadas para la protección de la piel o las verdes más orientadas a los problemas de diabetes”, explica el nutricionista, a tiempo de indicar que ambas son excelentes alimentos.
El sabor y las propiedades de cocción de las manzanas dependen de sus genes.

lunes, 8 de mayo de 2017

Alimentos saludables. Más vitalidad en el organismo

Un buen cambio en el estilo de vida

A menudo el ritmo de la vida genera obstáculos para dedicar el tiempo suficiente a una adecuada alimentación. Esto puede llevar a presentar alguna patología como obesidad, hipertensión, entre otras. Por ello, es necesario tomarse un momento para escuchar qué es lo que nuestro organismo nos está pidiendo.

Todos los días son un buen momento para dar el primer paso y comenzar a realizar cambios en nuestros hábitos alimentarios para sentirnos mejor. Pero, tal vez no sabes por dónde empezar, o piensas que es muy difícil. En este artículo de salud encontrarás algunos consejos para ayu- darte a comenzar a cambiar tu alimentación.

Primero, debes saber que no existe un alimento que sea totalmente completo para el organismo, excepto la leche materna para el bebé; por lo tanto, necesitamos una alimentación lo suficientemente variada para que nos garantice el aporte nutritivo adecuado.

Lo más importante, y a la vez difícil, es tomar la decisión de empezar a hacer una modificación en los hábitos alimentarios. Puedes hacerlo progresivamente, con un cambio por vez para asegurarte que van a mantenerse en el tiempo. Y no olvides hacerlo siempre con entusiasmo y alegría, pues el beneficio será aún mayor para tu salud día a día.

Recomendaciones nutricionales

Lo más importante es tomar la decisión de mejorar nuestro estilo de vida.

1. Variado: Hay que consumir todo tipo de alimentos de calidad y en la cantidad adecuada.

Lácteos: 2-3 raciones al día; carnes magras rojas: 1 porción, entre 1 a 2 veces por semana. Pescados: 1 ración 3 a 4 veces por semana; granos (pan, cereales, cereales integrales, arroz, pasta, papas): 4 a 6 porciones por día; leguminosas: 2 a 4 raciones por semana, frutas:

2 unidades por día; hortalizas: más de 2 raciones al día; aceite

de oliva: 3 a 6 porciones al día y huevos: 3 a 4 raciones por semana.

2. Cuatro veces al día: Por lo menos consumir cuatro comidas al día. Desayuno, almuerzo, merienda y cena. Si la jornada es extensa se puede agregar una colación, respetando un lapso mínimo de 1 y ½ y no más de cuatri horas entre cada una.

3. Compra inteligente: Antes de ir de compras debes planificar con tiempo qué tipo de alimentos necesitarás y en qué cantidad. A la hora de seleccionar el producto verifica su calidad mirando la fecha de caducidad, el tipo de envase, la calidad de las verduras y hortalizas.

4. ¡No te olvides desayunar!: Esta es una ración de gran importancia, ya que te ayudará a lograr un correcto rendimiento cognitivo en las tareas y en el trabajo.

5. Cena liviana: Durante esta comida debes intentar elegir alimentos fáciles de digerir, como verduras cocidas, sopas, pescados o lácteos, para un sueño reparador.

6. Disminuye

la ingesta: Comienza a eliminar de la dieta alimentos y bebidas con alto contenido calórico, como bebidas refrescantes, alimentos dulces, alcohol, aquellos productos que tengan grasa como pasteles, helados y galletas.

7. A moverse: Realiza algún tipo de actividad física moderada diariamente, por lo menos unos 30 minutos al día.

8. Hidratación: Consume agua. Bebe cada día, por lo menos dos litros de agua.

9. Come frutos secos: Tienen un importante aporte de ácidos grasos insaturados y fibra que ayuda a controlar los niveles de triglicéridos y colesterol en sangre; además ayudan a regular el tránsito intestinal y reducir los trastornos intestinales.

Se debe consumir de 3 a 7 porciones por semana de 20 a 30 gramos cada vez.

10. Incluye una comida favorita: Una vez por semana puedes incluir un plato de la comida que más te guste.

Lo recomendable es que no sea más de una porción de ese alimento apetecido, para respetar tu esquema nutricional.

Expertos objetan propuesta de calorías del Gobierno



La cantidad de calorías presentada por el Gobierno como adecuada para la alimentación de los trabajadores puede quedar pequeña cuando se trata de actividades físicas intensas como la minería y la construcción, según expertas en nutrición.

El 23 de abril, el viceministro de Presupuesto y Contabilidad Fiscal, Jaime Durán, consideró que la canasta básica familiar —uno de los parámetros que se utilizan para definir el alza salarial de cada año— de Bs 8.309 propuesta por la Central Obrera Boliviana (COB) contiene demasiadas calorías y contribuiría al sobrepeso de los trabajadores en el país.

“Los estándares internacionales recomiendan que una dieta balanceada está entre 2.400 y 2.600 calorías, la canasta de la COB contiene 5.000”, explicó a radio Panamericana.

Así, el incremento al haber básico y al mínimo nacional de 7 y 10,8%, respectivamente, acordado el jueves entre el Gobierno y la entidad matriz de los trabajadores no tomó en cuenta la propuesta de canasta básica cobista, que requería de un aumento salarial de entre 15 y 20%.

La canasta básica familiar de alimentos consiste en un conjunto de productos básicos de la dieta usual de la población, en cantidades suficientes para satisfacer las necesidades energéticas de todo individuo promedio.

La ingesta de “calorías está relacionada con la condición física de cada persona y la actividad que realiza ésta. Para un adulto de entre 25 y 45 años que pesa entre 65 y 75 kilos se recomienda un promedio de 2.700 calorías por día”, afirmó la presidenta del Colegio de Nutricionistas y Dietistas de Bolivia, Marlen Yucra.

RANGOS. “El boliviano llega, cubre y sobrepasa” la cantidad de calorías propuesta por el Ejecutivo, “porque nuestros hábitos son ricos en carbohidratos y grasa”, agregó la profesional. Este medio solicitó una entrevista con Durán para conocer la cantidad de calorías que usa el Gobierno para fijar el alza salarial, pero desde la Unidad de Comunicación del Ministerio de Economía informaron que la autoridad no dará ningún reporte sobre el tema.

“Dependiendo del tipo de trabajo intenso o moderado que realice, un individuo puede gastar entre 2.500 y 3.500 calorías”, indicó por su parte Mónica Barrera, especialista en nutrición clínica y docente de la carrera de Nutrición y Dietética de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA).

Según la experta, “el desgaste y consumo de energía” de un minero, de un albañil o de un trabajador de la industria pesada “es muchísimo mayor” a lo considerado por el Ejecutivo. “2.500 calorías sería un aporte bajo para una persona con actividad intensa”.

Las calorías, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), son la energía contenida en distintos alimentos que utiliza el organismo para desarrollar sus funciones vitales. Las personas con actividad sedentaria o ligera consumen menos que las que desarrollan una actividad intensa, indica.

“De 2.500 calorías, un individuo joven-adulto gasta 1.500 solo por estar echado y respirando, el resto de la energía que se consume sirve para cumplir tareas básicas como caminar, alimentarse y asearse. Entonces, se necesitaría mayor aporte calórico” para efectuar otras actividades físicas intensas, dijo Barrera.Las calorías necesarias vienen de “todo lo que son tubérculos, papa, camote, oca y chuño; de los cereales como el arroz, el trigo y la quinua; de los fideos y pastas; y de las grasas como el aceite y la mantequilla”, explicó Yucra

“Esta energía debe ser de alimentos nutritivos, que aporten también vitaminas y minerales”, agregó Barrera.

“Por ejemplo, la Organización Mundial de la Salud dice que hay que comer entre cuatro y seis panes (por día), pero eso depende de la demanda energética a cubrir y del estado nutricional de cada persona. No pan blanco, sino el elaborado con harina integral, que contiene otros componentes que son buenos para la nutrición”, dijo la especialista.

Desde octubre de 2015, el INE efectúa la Encuesta de Presupuestos Familiares para actualizar la base de datos del Índice de Precios al Consumidor (IPC) y la canasta básica de alimentos para los estudios de pobreza, además de los indicadores sobre seguridad alimentaria. Se prevé que este año se tendrá el nuevo IPC. El actual, que mide la tasa de inflación, se calcula con la base fijada en 2007 en las nueve ciudades capitales del país, además de El Alto.

¿Por qué comer gelatina?

Contiene colágeno, sales minerales, agua y azúcares
La gelatina es, sin ninguna duda, algo más que un postre delicioso, muy rico, sencillo y fácil de hacer, ya que se puede convertir en una buena y fresca alternativa, totalmente sana y con un alto valor nutritivo. Pero, ¿qué beneficios y propiedades tiene la gelatina?.

Beneficio
Numerosos estudios han puesto de manifiesto que la gelatina es sumamente beneficiosa para aquellas personas que padezcan de problemas digestivos, como pueden ser la gastritis, la hiperacidez, los cólicos y la colitis. También es ideal para personas que sufran de indigestión, ya que facilita el proceso de la digestión evitando la aparición de digestiones pesadas, y por ende tener un sistema digestivo sano.

El nutricionista Camilo Andrade, asegura que también es ideal en los más pequeños, formando parte por ejemplo de una dieta blanda, e incluso para personas de la tercera edad, enfermos, o personas que en definitiva se encuentren haciendo algún tipo de régimen alimenticio.
La gelatina es capaz de aportar nutrientes complementarios para la piel, uñas y cabello

domingo, 7 de mayo de 2017

Alimentos ricos en hierro

Tener una dieta con un aporte equilibrado de hierro es fundamental
El hierro es uno de los minerales fundamentales para el buen funcionamiento de nuestro organismo. Por ello, un déficit del mismo podría traer graves consecuencias para la salud. Comer alimentos ricos en hierro permite reducir la anemia. Además de complementos vitamínicos, la ingesta de hierro a través de la dieta es otra de las fórmulas más comunes para combatir la anemia.

Propiedades
El hierro favorece una correcta respiración al facilitar el transporte de oxígeno a los tejidos y hace que la sangre circule a un ritmo adecuado. Sirve para activar el grupo de vitaminas B, y estimula la inmunidad y la resistencia física, ya que una de sus funciones principales es la de oxidar la glucosa para convertirla en energía.
Los niños, adolescentes y embarazadas son las personas que necesitan un mayor aporte de hierro. Se trata pues de una de las sustancias más importantes para el correcto funcionamiento del cuerpo.
Las verduras de hoja oscura, el pescado, huevo, cereales integrales y frutos secos

sábado, 6 de mayo de 2017

Los alimentos que SÍ puedes comer en ayunas y los que NO

No todas las frutas o lácteos son recomendables al comenzar el día, ya que algunos contienen sustancias que no ayudan a que el cuerpo absorba los nutrientes que necesita. La nutricionista Claudia Abastoflor dice que los alimentos que sí se pueden comer en ayunas son:

La avena porque cubre la mucosa gástrica y su fibra ayuda a reducir el nivel de colesterol.

El trigo sarraceno es ideal para los alérgicos al gluten, estimula el trabajo del tracto digestivo y es fuente de proteínas, hierro y vitaminas.

La papilla de maíz elimina las toxinas, normaliza la flora intestinal y da sensación de saciedad.

El trigo germinado contiene vitamina E y ácido fólico, y ayuda al funcionamiento del intestino.

Consumir huevo ayuda a reducir la necesidad del cuerpo de más calorías a lo largo del día.

La sandía aporta líquido al organismo, ayuda a tener buena vista y un corazón saludable.

Los arándanos mejoran la memoria, la presión sanguínea y el funcionamiento del metabolismo.

El pan integral sin levadura aporta carbohidratos y otros elementos saludables para que el cuerpo obtenga energía.

Los frutos secos, como la almendra y nueces, mejoran el funcionamiento del tracto digestivo y normalizan la acidez del jugo gástrico.

La miel de abeja ayuda a despertar el organismo y lo llena de energía.

Los alimentos que no se debe comer al inicio del día son:

El pan elaborado con levadura. La levadura irrita las paredes del estómago y provoca gases.

Los dulces, porque el azúcar aumenta la insulina y no permite que el páncreas funcione regularmente.

El yogurt y lácteos agrios porque las bacterias lácteas son atacadas por el ácido del estómago, haciendo que su consumo sea inútil.

Las peras, porque su fibra irrita la mucosa gástrica.

El tomate porque aumenta la acidez del estómago y puede provocar úlceras gástricas.

Los pepinos y vegetales verdes provocan agruras, gases y malestares estomacales.

El plátano absorbe muy rápido el magnesio y el corazón puede verse afectado.

El té, una bebida milenaria con propiedades y beneficios



El té es una bebida que se prepara con las hojas de la planta Camellia sinensis. De acuerdo a cómo se procese una vez cosechada, se pueden obtener distintas variedades de té. Por ejemplo, cuando las hojas se tratan con vapor o calor retienen su color original y se obtiene té verde. Cuando las hojas se dejan oscurecer naturalmente sin tratarlas y se oxidan se obtiene té negro. Después del agua, el té es la bebida más consumida en el mundo, y la gente la ha estado cultivando y preparándola durante casi 5.000 años.

Existen otras clasificaciones para el té como el Orange Pekoe (o Pekoe naranja) que es un tipo especial de té negro de alta calidad compuesto puramente de los nuevos brotes de esa misma planta. Tiene compuestos con actividad antioxidante, por lo que ayuda a combatir el envejecimiento. Contiene naturalmente cafeína, que estimula el sistema nervioso, ayudando a mantener la sensación de alerta.

¿Por qué es importante en la alimentación diaria?

El té contiene compuestos benéficos como los polifenoles, que tienen propiedades antioxidantes por lo que ayudan a combatir el daño oxidativo de tejidos y células. Además, contiene cafeína natural, que estimula el sistema nervioso central ayudándonos a sentirnos alertas, con energía y a aumentar temporalmente el metabolismo. Por otra parte, una vez preparada la bebida, la misma se constituye en un excelente recurso para mantenernos hidratados.

¿Dónde lo encontramos?

Las hojas de té se comercializan sueltas o en pequeñas bolsas. Algunos suplementos o extractos especiales proporcionan los compuestos benéficos del té en cantidades equivalentes a las que se obtendrían de varias tazas de té preparado.

Fuentes:

• Khan N, Mukhtar H. Tea polyphenols for health promotion. Life Sci. 2007 July 26; 81 (7): 519-533.

• Blumethal M. Tea, black/green. The ABC Clinical Guide to Herbs. American Botanical Council. 2003. 1st edition.

Comida para el cerebro: Estos alimentos nos hacen más listos



PURA VIDA

Una dieta variada y completa en ciertos nutrientes, como el omega-3 (salmón, sardinas o atún), contribuye a que el rendimiento intelectual de una persona sea mayor. Lo dicen los estudios, como el que llevó a cabo Alexandra Richardson, de la Universidad de Oxford. “Los ácidos grasos omega-3 son muy importantes para las funciones del cerebro, como también lo son otros nutrientes imprescindibles que hay que vigilar, como el hierro, el yodo y la vitamina B12, que interactúan en el desarrollo cognitivo y de los que, parte de la población, puede presentar carencias. Se ha visto, por ejemplo, que cuando las personas tienen una anemia ferropénica o niveles de yodo o de vitamina B12 muy bajos, acaban afectadas sus funciones neuronales, de concentración o de asimilación”, afirma la nutricionista Alma Palau, presidenta del Consejo General de Dietistas-Nutricionistas de España. El neurocientífico Fernando Gomez-Pinilla, catedrático de la Universidad de California, continúa: “Lo que tiene de especial el omega-3, particularmente un componente que se llama DHA, es que es parte de la estructura original del cerebro. Resulta que las membranas, que son como las capas externas de las células nerviosas, también están hechas de esa sustancia. No en su totalidad, pero en parte de su estructura sí tienen DHA, que es muy importante para muchas funciones cognitivas”.

Si usted ha eliminado el pescado de su dieta por razones éticas o espirituales, no se alarme, pues el deporte también funciona. "En las últimas investigaciones, hemos encontrado que, por ejemplo, el ejercicio físico ayuda al cerebro a robustecerse de omega-3 e incluso a formarlo a pesar de que no venga de la dieta”, explica el profesor Gomez-Pinilla. “Con ayuda de la actividad física se puede suplir esta carencia”, añade.

Brócoli y frutos rojos

Tal y como indican todos los expertos, cuando se trata de cuidar la dieta para una estupenda salud mental, usted debe echar mano de varios alimentos, no solo de uno por el hecho de que sea potente. Como aconseja el doctor y catedrático de la Universidad de California, hay que pensar en una dieta equilibrada. "Una frase que se usa en biología y neurología reza: 'Demasiado de una cosa buena es malo'. Hay muchos alimentos positivos, pero si uno exagera se transforman en negativos. Por eso, la mejor recomendación es el balance. Varios productos buenos y complementarios”, dice. Entonces, además del pescado, ¿qué alimentos nos pueden ayudar a leer a Joyce o Proust con ligereza?

El brócoli, pese a su lado oscuro, es la estrella de la vitamina K, junto con las coles de Bruselas y las verduras de hoja verde, y ha dado resultados muy positivos no solo en su ya conocida e indispensable función en la coagulación de la sangre, sino también en tratamientos para el Alzheimer. Una investigación de la Universidad de Montreal en Canadá demostró que las personas mayores que presentaban más presencia de vitamina K1 elaboraban mejores discursos, progresaban en su expresión verbal y poseían mayor retención de la información.

Las almendras y las nueces, por su parte, se llevan el galardón de alimentos hipercompletos. Ambas contienen precursores de omega-3, vitamina E y magnesio, que permiten mantener el nivel de concentración durante un tiempo sin que luego haya un bajón rápido, como podría suceder después de tomar un piscolabis con azúcar. Además, aportan gran cantidad de proteínas, que, entre otras cosas, estimulan las llamadas neuronas orexinas, que se encargan de mantenernos despiertos y atentos.

Algunos frutos rojos, como los arándanos y las fresas, son unos grandes aliados para aumentar la atención y fijar la memoria. Las pesquisas de la doctora e investigadora Elizabeth Devore, profesora de la Harvard Medical School en Boston, afirmaron que la ingesta constante de estas frutas ayuda a frenar la pérdida de memoria. Y las investigaciones del doctor Jeremy Spencer, de la Reading University en Inglaterra, constataron que los arándanos propiciaban la concentración durante varias horas, por lo que si usted estudia u oposita, súrtase de estos productos.

¿Chocolate para la agilidad mental? Con matices

Partimos de que “el cerebro es bastante plástico y flexible”, como apunta el neurocientífico, pero aun así, no es eterno, y con los años sufre un deterioro inevitable. “Tiene un nivel de consumo energético tremendamente alto, y casi todos estos procesos de producción de energía producen mucho estrés oxidativo”, explica el especialista. Es aquí donde aparece otro elemento importante en la dieta que debe tener en cuenta: los flavonoides, unos pigmentos naturales de los vegetales cuya capacidad como antioxidante libera y limpia el cerebro de toda esa oxidación a la que le sometemos solo por el mero hecho de funcionar. ¿Dónde encontrarlos? Las manzanas y los cítricos tienen una gran concentración de ellos, y las investigaciones, como la del profesor Adam Brickman, de la Universidad de Columbia en Nueva York, han descubierto que los flavonoides del chocolate negro poseen también un potencial revitalizante en cerebros ya desgastados por la edad. “El efecto es el mismo provenga de donde provenga, pero si hay que ponerle a un paciente una dieta más rica en flavonoides, no le diría que se atiborrara a chocolate negro”, matiza de forma simpática la nutricionista Palau. “Tendría que incorporar a su dieta manzanas, naranjas, uvas, té verde, bayas y frutas rojas, que son más saludables. Porque lo que hay que mirar siempre es el efecto final del contenido global de un alimento. Cuanto más completo y saludable sea en su totalidad, mejor”, aclara.

A estas alturas puede que su cerebro esté demandando una dosis extra de parte de estos súper nutrientes para seguir con la inteligencia a pleno rendimiento y poder acabar de leer el tema. Si es así, tome nota. Para cubrir las necesidades de hierro se recomienda incorporar a la dieta carnes rojas y vegetales verdes (especialmente, espinacas, muy ricas también en ácido fólico, que ayuda a frenar el deterioro cognitivo); para mantener óptimo el estado del yodo, basta con una cucharadita de sal yodada al día (la que se usa para cocinar), y en el caso de esa vitamina tan importante que es la B12, conviene consumir a diario un vaso de leche o dos, carne, pescado (preferiblemente azul), huevo, frutas y verduras. Si además lo combina todo, semanalmente, con cereales, legumbres, frutos secos y lácteos, ¡sin olvidar una abundante hidratación constante!, su cerebro irá a mil por hora. “Los estudios son claros respecto a que el que come mejor tiene una capacidad cerebral más alta que el que lleva una dieta pobre. Y, sobre todo, cuando se suma una actividad física regular”, concluye Gomez-Pinilla. Los niveles de atención que demandan ciertos deportes estimulan esta cualidad.

viernes, 5 de mayo de 2017

¿Por qué el tomate no debe faltar en el menú?


Unos tomates rojos y jugosos son irresistibles a la vista y al paladar. Pero ese producto no solo tiene grandes cualidades de conquista por su vistosa apariencia sino también por su alto poder nutritivo.

Anabel Aragón, responsable de Nutrición, Salud y Bienestar de Nestlé España explica, en un artículo del portal EFE Salud, por qué es importante sacarle más provecho a esa hortaliza.

El tomate, según indica esa experta, es bajo en calorías y aporta nutrientes esenciales para el organismo como la fibra y la vitamina C, que contribuyen al funcionamiento normal del sistema inmunológico y nervioso.

Además, reduce el cansancio y la fatiga a tiempo de proteger a las células debido a su capacidad antioxidante. También es esencial en la formación del colágeno, huesos, cartílagos, dientes, encías, piel y vasos sanguíneos.

Asimismo, favorece la absorción del hierro, por eso siempre se aconseja tomar frutas y verduras crudas -recuerda Aragón- que son fuente exclusiva de la vitamina C, después de un plato de legumbres, para que el hierro se absorba mejor.

La fibra juega un papel relevante en el movimiento intestinal, la regulación de los niveles de grasa en sangre y el asentamiento y la selección de nuestra flora intestinal.



Consejos para sacar más provecho a esta hortaliza



1.- A la hora de comprar tomates: Es importante fijarse que su piel sea brillante y tersa. La pulpa debe mostrar una apariencia firme. Dependiendo de la variedad, hay que elegir colores distintos.Pintones casi verdes para alargar su tiempo de consumo si son tomates de corta vida, Esos son buenos para ensaladas. Rojos si son para salsas o sopas. Los de larga vida, es importante que sean rojos intensos y pulpa firme.

2.- Para su mejor conservación: Se debe mantener los tomates en un lugar fresco. Hay que evitar almacenarlos en la heladera porque su sabor y textura se altera un poco.

3.- Si se guarda en la heladera: Dentro del refrigerador hay que ponerlos en su zona más templada, que son los cajones de la verdura y sacarlos con anticipación antes de su consumo.

4.- Varios usos en la cocina: El tomate, junto con la cebolla, es una de las hortalizas más consumidas. Se puede usar en muchos platos, desde mermeladas y salsas hasta sopas, ensaladas, zumos, base para pastas, carnes y otros platos.

¿Carne roja o blanca?

Es necesario equilibrar nuestro consumo de carnes

Todas las carnes, tanto las rojas como las blancas, contienen proteínas de excelente calidad y una buena cantidad y variedad de vitaminas y minerales. Además, el consumo moderado de este grupo de alimentos contribuye a un buen estado de salud y al crecimiento y desarrollo de los tejidos, así como a la prevención de enfermedades como la anemia y la desnutrición.

¿Cuál es cuál?
Cuando se habla de carnes rojas se hace referencia a la carne de caballo; de vacuno, en especial el vacuno mayor como la vaca, el buey y el toro; de caza, entre las que destacan la liebre, la perdiz, el pichón, el faisán y la codorniz; y las vísceras como los riñones, el hígado y el corazón. Las carnes de pollo, pavo o conejo son las consideradas blancas.

El nutricionista Camilo Andrade recomienda variar el consumo de los dos tipos de carne, ya que es una buena forma de obtener lo bueno de cada una de ellas. Atendiendo a estos criterios nutricionales, las recomendaciones relativas al consumo de carne son de entre 3 y 4 raciones a la semana para la población general. En estas raciones debe abundar la carne blanca. De forma ocasional, unas 2 o 3 veces al mes, se recomienda incluir carnes rojas.

Ambas carnes se complementan muy bien, por lo que deben estar presentes en la dieta