jueves, 29 de septiembre de 2016
5 verdades y mentiras acerca de la hidratación
Básicamente las células no funcionan sin agua, por lo cual es importante mantener una hidratación apropiada. Sin embargo hay muchos mitos con respecto a esto que resultan perjudiciales para la salud y que se acentúan en los días en los que las temperaturas son altas. El portal harmonia.la indica cinco de los más frecuentes.
1. Si tu orina es más oscura de lo normal es un signo de que estás deshidratado.
Mentira. Esto no necesariamente es así, ya que el color de la orina también puede ser afectado por algunas comidas con los espárragos y el betabel.
2. Tomar 8 vasos de agua al día mantiene la piel hidratada y joven.
Mentira. Tomar agua de más no mejora la piel de las personas que ya tienen buenos niveles de hidratación. Si a pesar de beber suficiente agua tienes piel seca es mejor que consideres otra opción para hidratarla.
3. La buena hidratación previene los cálculos renales.
Verdadero. La buena hidratación juega un papel para prevenir la formación de cálculos renales, además de contrarrestar el estreñimiento y la asma desencadenada por actividad física. También puede ayudar a prevenir enfermedades vasculares como embolias o presión bajo. Esto es particularmente importante para quienes sufren de diabetes.
4. Es importante mantenerte hidratado durante el ejercicio.
Verdadero. Para los atletas es de fundamental importancia reponer los líquidos que están perdiendo a causa de la actividad física. Sin embargo pasarse de las cantidades adecuadas de agua también tiene sus riesgos, ya que no se debe de consumir más agua de la que los riñones es capaz de procesar. El exceso de líquidos hace que las células se inflamen y los niveles de sodio y electrolitos en la sangre bajen , lo cual no es bueno para tu salud. Si quieres saber más sobre la importancia de la hidratación durante el ejercicio puedes consultar lo que escribimos aquí.
5. No hidratarse adecuadamente puede tener consecuencias físicas y mentales.
Verdadero. De acuerdo a estudios realizados en el “Laboratorio de Rendimiento Humano de Connecticutt” la deshidratación puede causar dolores de cabeza, fatiga, ansiedad y también afectar nuestra concentración, tiempo de reacción, capacidad de aprendizaje, memorización y estado de ánimo.
domingo, 25 de septiembre de 2016
Es bueno comer antes de acostarse
Recientemente han surgido opiniones de expertos sobre cómo las comidas en la noche, especialmente aquellas que son abundantes y que realizamos antes de irnos a dormir, pueden alterar el organismo y los procesos digestivos.
Un estudio presentado en el Congreso de la Sociedad Europea de Cardiología, que se realizó en Roma la semana pasada, analizó con más de 700 adultos el vínculo entre la hora en que se consumen los alimentos y el efecto en el organismo.
Encontró que consumir alimentos tarde en la noche tiene un impacto significativo en la presión arterial del individuo.
Durante la noche, un proceso fisiológico normal es el descenso de la presión arterial.
Sin embargo, el estudio encontró que un 24,2 por ciento de los participantes que habían comido dentro de las dos horas antes de acostarse no habían mostrado un descenso adecuado de la presión sanguínea. Entre quienes habían cenado más temprano, el porcentaje fue de 14,2.
"Estado de alerta"
Según los expertos, consumir alimentos antes de irse a acostar produce que el organismo permanezca en un estado de "alta alerta", lo cual estimula la producción de hormonas del estrés, como la adrenalina, y también pueden alterar los ritmos circadianos.
La doctora Ebru Ozpelit, profesora de cardiología de la Universidad de Dokuz Eylul, en Izmir, Turquía, quien presentó el estudio, afirmó que los resultados sugieren que la hora en la que la gente come es tan importante como los alimentos que ingiere.
Ozpelit dijo que la vida moderna está alentando "hábitos de alimentación erráticos", como saltarse el desayuno y comer cada vez más tarde, que se están volviendo cada vez más prevalentes y pueden causar daños a lo largo del tiempo.
"Debemos definir la frecuencia ideal y la hora de los alimentos", advirtió Ozpelit
"Comer desayuno es importante, debemos tener un desayuno fuerte, y no saltarnos el almuerzo. Debemos tomar una pequeña cena y ésta no debe ser después de las 7 de la noche", declaró.
OBESIDAD
Los expertos afirman que el cuerpo humano no está diseñado para enfrentarse a muchos de los aspectos de la vida moderna.
Con la llegada de la luz artificial y la industrialización, los humanos modernos comenzaron a experimentar horas prolongadas de iluminación cada día y esto resultó en un consumo extendido de alimentos y a comer cada vez más tarde en el día.
La doctora Sandra Hirsch, experta en nutrición humana del Instituto de Nutrición y Tecnología de Alimentos de la Universidad de Chile, afirma que, en efecto, las comidas nocturnas pueden tener efectos adversos en el organismo.
"Cuando uno come se desarrolla toda una serie de procesos metabólicos", dice la experta en un artículo de BBC Mundo.
"Se liberan hormonas en el proceso de absorción de alimentos. Por lo tanto, si yo como y me acuesto, esos mecanismos hormonales pueden tener impactos negativos en el organismo".
Por ejemplo, dice la experta que las comidas antes de acostarse pueden tener efectos en el aumento de peso y la obesidad.
"Comer tarde en la noche puede inhibir la degradación de la grasa en el organismo, que es un proceso habitual durante la noche", afirma Sandra Hirsch.
Un estudio presentado en el Congreso de la Sociedad Europea de Cardiología, que se realizó en Roma la semana pasada, analizó con más de 700 adultos el vínculo entre la hora en que se consumen los alimentos y el efecto en el organismo.
Encontró que consumir alimentos tarde en la noche tiene un impacto significativo en la presión arterial del individuo.
Durante la noche, un proceso fisiológico normal es el descenso de la presión arterial.
Sin embargo, el estudio encontró que un 24,2 por ciento de los participantes que habían comido dentro de las dos horas antes de acostarse no habían mostrado un descenso adecuado de la presión sanguínea. Entre quienes habían cenado más temprano, el porcentaje fue de 14,2.
"Estado de alerta"
Según los expertos, consumir alimentos antes de irse a acostar produce que el organismo permanezca en un estado de "alta alerta", lo cual estimula la producción de hormonas del estrés, como la adrenalina, y también pueden alterar los ritmos circadianos.
La doctora Ebru Ozpelit, profesora de cardiología de la Universidad de Dokuz Eylul, en Izmir, Turquía, quien presentó el estudio, afirmó que los resultados sugieren que la hora en la que la gente come es tan importante como los alimentos que ingiere.
Ozpelit dijo que la vida moderna está alentando "hábitos de alimentación erráticos", como saltarse el desayuno y comer cada vez más tarde, que se están volviendo cada vez más prevalentes y pueden causar daños a lo largo del tiempo.
"Debemos definir la frecuencia ideal y la hora de los alimentos", advirtió Ozpelit
"Comer desayuno es importante, debemos tener un desayuno fuerte, y no saltarnos el almuerzo. Debemos tomar una pequeña cena y ésta no debe ser después de las 7 de la noche", declaró.
OBESIDAD
Los expertos afirman que el cuerpo humano no está diseñado para enfrentarse a muchos de los aspectos de la vida moderna.
Con la llegada de la luz artificial y la industrialización, los humanos modernos comenzaron a experimentar horas prolongadas de iluminación cada día y esto resultó en un consumo extendido de alimentos y a comer cada vez más tarde en el día.
La doctora Sandra Hirsch, experta en nutrición humana del Instituto de Nutrición y Tecnología de Alimentos de la Universidad de Chile, afirma que, en efecto, las comidas nocturnas pueden tener efectos adversos en el organismo.
"Cuando uno come se desarrolla toda una serie de procesos metabólicos", dice la experta en un artículo de BBC Mundo.
"Se liberan hormonas en el proceso de absorción de alimentos. Por lo tanto, si yo como y me acuesto, esos mecanismos hormonales pueden tener impactos negativos en el organismo".
Por ejemplo, dice la experta que las comidas antes de acostarse pueden tener efectos en el aumento de peso y la obesidad.
"Comer tarde en la noche puede inhibir la degradación de la grasa en el organismo, que es un proceso habitual durante la noche", afirma Sandra Hirsch.
jueves, 15 de septiembre de 2016
El kiwi y sus múltiples beneficios en el desayuno y en la cena
El kiwi es una de las frutas más completas y además de ser deliciosa, está repleta de nutrientes. Contiene vitaminas, minerales, fibra, antioxidantes, agua y es bajo en calorías y carbohidratos.
Es una de las grandes fuentes de vitamina C, posee el doble que la naranja y es recomendada para el invierno, ya que potencia las defensas del organismo, ayudando a combatir virus y bacterias y prevenir gripes y resfriados.
El kiwi además cuida el corazón, pues contiene potasio que regula la presión arterial y favorece la circulación sanguínea y su fibra, reduce los niveles de colesterol malo y triglicéridos en la sangre. Esta rica cantidad de fibra previene además enfermedades del sistema digestivo, favorece sus procesos y facilita el tránsito intestinal. Combate y previene la anemia. Su alto contenido de vitamina C ayuda al organismo a absorber el hierro.
También posee propiedades antioxidantes, por lo que combate los radicales libres que dañan las células y previene enfermedades degenerativas y el envejecimiento prematuro.
Es una de las grandes fuentes de vitamina C, posee el doble que la naranja y es recomendada para el invierno, ya que potencia las defensas del organismo, ayudando a combatir virus y bacterias y prevenir gripes y resfriados.
El kiwi además cuida el corazón, pues contiene potasio que regula la presión arterial y favorece la circulación sanguínea y su fibra, reduce los niveles de colesterol malo y triglicéridos en la sangre. Esta rica cantidad de fibra previene además enfermedades del sistema digestivo, favorece sus procesos y facilita el tránsito intestinal. Combate y previene la anemia. Su alto contenido de vitamina C ayuda al organismo a absorber el hierro.
También posee propiedades antioxidantes, por lo que combate los radicales libres que dañan las células y previene enfermedades degenerativas y el envejecimiento prematuro.
Los beneficios de la papaya para el cuidado de la piel
Rica en antioxidantes y compuestos que ayudan a oxigenar y limpiar la piel, la papaya es ideal para combatir los comedones del acné. Para preparar una mascarilla exfoliante se requiere una rodaja de papaya y cinco gramos de azúcar. Se tritura y mezcla bien y se aplica en el rostro con ligeros masajes circulares. Se deja actuar por 10 minutos y se enjuaga con agua fría. Se aconseja hacer el tratamiento tres veces a la semana.
Para el contorno de labios se hace un puré con la fruta y aceite de coco, se aplica y se deja actuar por 10 minutos. En lo posible hacerlo a diario y al cabo de 15 días notará la piel de esta zona elástica y firme.
Para los talones partidos se recomienda colocar varias rodajas de papaya en un recipiente y pisarlas con los pies. Cuando se forme el puré restregar los talones en esta masa y dejarlo actuar por 20 minutos y repetir tres veces por semana. El zumo de esta fruta hidrata, regenera y nutre la piel, impidiendo la sequedad.
Siempre coma una rebanada El melón es pura salud
El melón tiene un exquisito sabor, un agradable olor y gran cantidad de beneficios para la salud. Este fruto aporta vitaminas, hidrata el cuerpo y tiene un sabor dulce muy refrescante que lo hace ideal para estos días calurosos.
Bueno para el corazón y la piel. Esta fruta ayuda a cuidar la salud del corazón, ya que se trata de una fuente rica en licopeno, un pigmento vegetal que reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares y la presión arterial. Asimismo, alcanza una sola taza de melón picado para satisfacer el 10 por ciento de las necesidades de calorías, lo hace de manera muy saludable.
El melón también es una buena fuente de citrulina, una sustancia que el cuerpo utiliza para producir el aminoácido arginina que desempeña una función esencial para el sistema inmune. Se ha demostrado que este compuesto puede ayudar a sanar heridas y cortes.
Perfecto para las mujeres. Su color brillante se debe nada más y nada menos que al alto contenido de la vitamina A, excelente para la visión y el crecimiento de los huesos. De otro lado, está la vitamina C que funciona como excelente antioxidante natural. Asimismo, ayuda al colágeno a formar huesos, cartílagos y músculos.
Los melones ayudan a cuidar la salud de la piel, ayudando, incluso, a prevenir las arrugas del rostro. Además, previenen los calambres durante los ciclos menstruales, defectos de nacimiento en los bebés, el colesterol alto y la deshidratación por su contenido de agua.
Este también es diurético y actúa como laxante suave, elimina toxinas y ayuda también a neutralizar la acidez, pues funciona como desintoxicante. Disminuye los excesos de compuestos que no le hacen bien al organismo.
Da su punto de vista. La doctora Clodinel Ortiz afirma que se lo puede comer todos los días sin exagerar, pero este no sirve para reemplazarlo por comidas, ya que es ideal para rehidratar. "No se debe comer un melón entero, pero sí algunas rodajas entre las comidas", manifestó la doctora.
1. Rehidrata.
El melón es una de las frutas más refrescantes que puede encontrar y es perfecta para hidratar durante los días más calientes.
2. Piel.
Contiene vitamina A que beneficia a la piel evitando que se reseque. Además es uno de los mejores antioxidantes.
3. Color.
Contiene betacaroteno, este nutriente favorece la pigmentación de la piel ayudando a conseguir y mantener un buen bronceado.
4. Salud
Previene la gota, la artritis y nivela el colesterol alto y aporta muy pocas calorías.
Bueno para el corazón y la piel. Esta fruta ayuda a cuidar la salud del corazón, ya que se trata de una fuente rica en licopeno, un pigmento vegetal que reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares y la presión arterial. Asimismo, alcanza una sola taza de melón picado para satisfacer el 10 por ciento de las necesidades de calorías, lo hace de manera muy saludable.
El melón también es una buena fuente de citrulina, una sustancia que el cuerpo utiliza para producir el aminoácido arginina que desempeña una función esencial para el sistema inmune. Se ha demostrado que este compuesto puede ayudar a sanar heridas y cortes.
Perfecto para las mujeres. Su color brillante se debe nada más y nada menos que al alto contenido de la vitamina A, excelente para la visión y el crecimiento de los huesos. De otro lado, está la vitamina C que funciona como excelente antioxidante natural. Asimismo, ayuda al colágeno a formar huesos, cartílagos y músculos.
Los melones ayudan a cuidar la salud de la piel, ayudando, incluso, a prevenir las arrugas del rostro. Además, previenen los calambres durante los ciclos menstruales, defectos de nacimiento en los bebés, el colesterol alto y la deshidratación por su contenido de agua.
Este también es diurético y actúa como laxante suave, elimina toxinas y ayuda también a neutralizar la acidez, pues funciona como desintoxicante. Disminuye los excesos de compuestos que no le hacen bien al organismo.
Da su punto de vista. La doctora Clodinel Ortiz afirma que se lo puede comer todos los días sin exagerar, pero este no sirve para reemplazarlo por comidas, ya que es ideal para rehidratar. "No se debe comer un melón entero, pero sí algunas rodajas entre las comidas", manifestó la doctora.
1. Rehidrata.
El melón es una de las frutas más refrescantes que puede encontrar y es perfecta para hidratar durante los días más calientes.
2. Piel.
Contiene vitamina A que beneficia a la piel evitando que se reseque. Además es uno de los mejores antioxidantes.
3. Color.
Contiene betacaroteno, este nutriente favorece la pigmentación de la piel ayudando a conseguir y mantener un buen bronceado.
4. Salud
Previene la gota, la artritis y nivela el colesterol alto y aporta muy pocas calorías.
domingo, 11 de septiembre de 2016
La tendencia millennial por lo saludable crece en Santa Cruz
Quizás ninguna generación en la historia se ha preocupado tanto por su bienestar como los millennials. El hecho de haber visto cómo los malos hábitos causaron problemas de salud en las generaciones precedentes y el impacto de sus hábitos en el medioambiente, hace que los jóvenes actuales opten por un estilo de vida consciente en todo sentido: desde lo que comen hasta la ropa que visten.
El bienestar millennial es un cóctel de tres elementos clave: la alimentación, la actividad física moderada y los hábitos de consumo responsable, como reciclar materiales o no usar nada de plástico. Todo en aras de estar en paz consigo mismos y con la naturaleza.
“Yo creo que este cambio mental se debe a que a nosotros nos ha tocado vivir las primeras consecuencias de las acciones de nuestros padres. Desde cambios climáticos ocasionados por el consumismo extremo y falta de conciencia, hasta el desmedido capitalismo global que pone las ganancias empresariales antes de la salud y bienestar del consumidor,” dice Valeria Hinojosa (28), fundadora de un blog de estilo de vida consciente que tiene miles de seguidores.
Para ella, todo es cuestión de una conexión armoniosa entre cuerpo, mente y alma. Si tuviera que elegir tres elementos claves para alcanzar esa armonía no duda en mencionar la práctica habitual de yoga, llevar una dieta vegana y consumir de forma consciente, para apoyar prácticas ecológicas, de comercio justo e innovadoras.
Valeria, que nació en Bolivia pero vive hace ocho años en Miami (Estados Unidos), trata de transmitir esa filosofía a sus seguidores en Instagram, donde tiene más de 21.000 seguidores o Facebook, donde acumula cerca de 3.000 ‘likes’.
¿Majadito de quinua light?
El movimiento saludable está en crecimiento en Santa Cruz y prueba de ello cada vez hay más opciones para satisfacer a esa exigente clientela.
En los últimos años se abrieron restaurantes vegetarianos, centros para practicar actividades físicas alternativas a las tradicionales y tiendas que ofrecen productos naturales y ecológicos. “Creo que se ha llegado a comprender que el estar sano no es la ausencia de enfermedad, sino un estado de completo bienestar físico, mental, social y espiritual también”, manifiesta Gretel Stehli, propietaria de un empresa catering que responde a la demanda saludable con almuerzos que llevan alimentos nutritivos y son preparados sin grasas.
Como su empresa, varias otras ofrecen lo que hace unas décadas posiblemente hubiera sido un rotundo fracaso y sin embargo hoy es un éxito: jugos de vegetales con semillas, delivery de ensaladas o majadito de quinua con carne de soya. “El movimiento consciente en Bolivia está creciendo poco a poco. Desde restaurantes veganos y vegetarianos, hasta estudios de yoga y productos de belleza y medicina natural. También es muy gratificante ver que no solo hay un mercado sino también una demanda”, asegura Valeria.
Una búsqueda rápida en internet muestra que en Santa Cruz hay oferta para todos: empresas que se dedican a hacer jugos exóticos y nutritivos, ideales para los ‘juicers’; líneas de productos sin gluten y varios restaurantes veganos.
El lado oscuro
Hay muchas filosofías nutritivas, hay quienes piensan que el hombre del Paleolítico se alimentaba mejor y le declaran la guerra a los carbohidratos; los que comen todo crudo o los que sobreviven a base de zumos y batidos. El objetivo es el mismo, alimentarse de la mejor forma posible, pero cuando se exagera puede volverse una obsesión enfermiza y generar incluso complicaciones de salud. Ese trastorno tiene nombre: ortorexia.
La sicóloga Laura Moscoso recomienda informarse de fuentes confiables, como nutricionistas y médicos, qué es lo mejor para cada persona y no dejarse llevar solo por tendencias
El bienestar millennial es un cóctel de tres elementos clave: la alimentación, la actividad física moderada y los hábitos de consumo responsable, como reciclar materiales o no usar nada de plástico. Todo en aras de estar en paz consigo mismos y con la naturaleza.
“Yo creo que este cambio mental se debe a que a nosotros nos ha tocado vivir las primeras consecuencias de las acciones de nuestros padres. Desde cambios climáticos ocasionados por el consumismo extremo y falta de conciencia, hasta el desmedido capitalismo global que pone las ganancias empresariales antes de la salud y bienestar del consumidor,” dice Valeria Hinojosa (28), fundadora de un blog de estilo de vida consciente que tiene miles de seguidores.
Para ella, todo es cuestión de una conexión armoniosa entre cuerpo, mente y alma. Si tuviera que elegir tres elementos claves para alcanzar esa armonía no duda en mencionar la práctica habitual de yoga, llevar una dieta vegana y consumir de forma consciente, para apoyar prácticas ecológicas, de comercio justo e innovadoras.
Valeria, que nació en Bolivia pero vive hace ocho años en Miami (Estados Unidos), trata de transmitir esa filosofía a sus seguidores en Instagram, donde tiene más de 21.000 seguidores o Facebook, donde acumula cerca de 3.000 ‘likes’.
¿Majadito de quinua light?
El movimiento saludable está en crecimiento en Santa Cruz y prueba de ello cada vez hay más opciones para satisfacer a esa exigente clientela.
En los últimos años se abrieron restaurantes vegetarianos, centros para practicar actividades físicas alternativas a las tradicionales y tiendas que ofrecen productos naturales y ecológicos. “Creo que se ha llegado a comprender que el estar sano no es la ausencia de enfermedad, sino un estado de completo bienestar físico, mental, social y espiritual también”, manifiesta Gretel Stehli, propietaria de un empresa catering que responde a la demanda saludable con almuerzos que llevan alimentos nutritivos y son preparados sin grasas.
Como su empresa, varias otras ofrecen lo que hace unas décadas posiblemente hubiera sido un rotundo fracaso y sin embargo hoy es un éxito: jugos de vegetales con semillas, delivery de ensaladas o majadito de quinua con carne de soya. “El movimiento consciente en Bolivia está creciendo poco a poco. Desde restaurantes veganos y vegetarianos, hasta estudios de yoga y productos de belleza y medicina natural. También es muy gratificante ver que no solo hay un mercado sino también una demanda”, asegura Valeria.
Una búsqueda rápida en internet muestra que en Santa Cruz hay oferta para todos: empresas que se dedican a hacer jugos exóticos y nutritivos, ideales para los ‘juicers’; líneas de productos sin gluten y varios restaurantes veganos.
El lado oscuro
Hay muchas filosofías nutritivas, hay quienes piensan que el hombre del Paleolítico se alimentaba mejor y le declaran la guerra a los carbohidratos; los que comen todo crudo o los que sobreviven a base de zumos y batidos. El objetivo es el mismo, alimentarse de la mejor forma posible, pero cuando se exagera puede volverse una obsesión enfermiza y generar incluso complicaciones de salud. Ese trastorno tiene nombre: ortorexia.
La sicóloga Laura Moscoso recomienda informarse de fuentes confiables, como nutricionistas y médicos, qué es lo mejor para cada persona y no dejarse llevar solo por tendencias
viernes, 9 de septiembre de 2016
Yogurt: ¿Desnatado o entero?
Cuando hablamos de dietas de adelgazamiento, todas damos por sentado que la grasa engorda, por lo tanto es mejor comer alimentos libres de grasa. ¿No es cierto? Ahora borra de tu mente todas estas concepciones; olvídate de que la grasa engorda y de que la clave para perder peso está en el déficit calórico o reducción de calorías en nuestra ingesta diaria. Y es que, según un estudio llevado a cabo en Reino Unido por Public Health Collaboration (una organización sin ánimo de lucro centrada en temas de salud), las dietas bajas en grasa no son la solución ni para perder peso, ni para llevar un estilo de vida saludable. Dos afirmaciones difíciles no exentas de polémica que necesitan ser cuestionadas antes de tomarlas al pie de la letra.
Uno de los motivos por lo que afirman esto los expertos que han participado en este estudio –entre los que se encuentran cardiólogos, nutricionistas y psiquiatras– es el hecho de que en Reino Unido se han incrementado considerablemente los índices de obesidad y de personas que padecen diabetes del tipo 2. Y todo ello pese a que se consume una media de 383 calorías menos de las recomendadas y menos cantidad de grasa de la indicada. Motivos que les han llevado a poner en duda la recomendación de la OMS que limita la ingesta diaria de grasa y a poner en jaque al imperio de la comida light y de los alimentos ‘bajos en grasa’ y ‘bajos en colesterol’.
Nuevas recomendaciones
La Public Health Collaboration sugiere eliminar la recomendación de que nuestra ingesta diaria de grasa no supere el 30-35% del total de calorías consumidas. “Las recomendaciones deberían centrarse en los beneficios saludables que tiene comer los alimentos en su forma natural, sin tener en cuenta la cantidad de grasa que contengan”, sugieren unas líneas del informe, en el que se apuesta por una alimentación en la que se consuman menos hidratos de carbono y se preste menos atención a las calorías. Afirmaciones que ponen en duda muchos de los mantras que teníamos asimilados acerca de la pérdida de peso.
La grasa no es el enemigo
Aunque el estudio de Public Health Collaboration asegura que “la grasa no engorda”, se abre un debate desconocido hasta ahora en el mundo de la nutrición. La pregunta es: ¿son tan malas las grasas como pensábamos? Vayamos por partes. A la recomendación de este estudio de obviar la norma de no superar una ingesta diaria del 30% de grasas (cantidad que debe repartirse así: 10% de grasas saturadas, 10-12% de monoinsaturadas y 5-10% de poliinsaturadas) los expertos concluyen que, según un estudio reciente de AECOSAN (Agencia Española de Consumo de Seguridad y Nutrición), los ácidos grasos trans, presentes en los alimentos principalmente por motivos tecnológicos, están asociados con diversos problemas de salud como enfermedad coronaria o diabetes.
A esta conclusión, la experta en nutrición y psicóloga, Itziar Digón asegura en su blog que las grasas saturadas tienen efectos negativos sobre el corazón. Sin embargo, también es cierto, tal y como señala Digón, que no hace falta restringir el 100% de su consumo. “Un 5% de las calorías totales al día pueden provenir de grasas saturadas”, explica la experta. Y es que esa ingesta de grasa diaria debe hacerse, tal y como indican las recomendaciones expertas internacionales, a través de las grasas saludables contenidas en alimentos como sardinas, aguacate, salmón o frutos secos; con aceite de oliva y girasol y con lácteos (que contienen de forma natural grasas saturadas). Pero siempre teniendo presente que la OMS y la American Heart Association recomiendan disminuir el aporte de ácidos grasos transgénicos al 1% del aporte calórico total (unos 2 gr al día para una dieta de 2.000 kcal).
¿Entero o desnatado?
“Evita los ‘alimentos falsos’ todo lo que puedas. En ellas su estado natural ha sido altamente procesado con azúcares, aceites procesados y otros aditivos que no alimentan y que no sacian”, se afirma en este informe, en el que se recomienda evitar el consumo de quesos y yogures bajos en grasa y potenciar el de las versiones “enteras”. Este punto pone en duda otra de las ‘afirmaciones’ que viene siendo centro de atención hace ya un tiempo: la comida light (en exceso) también engorda. Y es que, el hecho de tomar alimentos light no implica que el consumirlos sin control no lleve a un incremento de calorías superior al adecuado. Entonces, ¿es mejor comer un yogur entero que varios desnatados? Pues sí. Para Dijon siempre es mejor comer alimentos en su versión natural, ya que a un alimento light (para que sea ‘light’) se le ha eliminado un 30% de su grasa con respecto al alimento original, pero para hacerlo le han añadido azúcares y otros aditivos para conseguir la textura y el sabor que le gusta al consumidor. Con lo cual, tienen menos cantidad de grasas pero más azúcares añadidos que aportan calorías pero no tienen ningún valor nutricional. Sin embargo, es esencial que las personas con tasas elevadas de colesterol controlen las versiones enteras de lácteos.
¿Lo ‘light’ engorda?
A pesar que lo ‘light’ fue creado para prevenir la obesidad, lo irónico es que, según este estudio, el hecho de haber reducido la ingesta calórica y la cantidad diaria de grasa no parece haber sido una solución a la obesidad, cuyo índice ha aumentado considerablemente en los últimos años, sobre todo en Reino Unido. Para los expertos de este estudio las dietas bajas en grasa son un error. Según ellos, el motivo por el cual la gente sigue engordando está en otros factores como el hecho de comer entre horas, en contar las calorías diarias que tomamos y en el hecho de optar por versiones light y bajas en grasa (que ellos llaman fake foods) en lugar de por alimentos en su versión “natural” (entera). La pregunta que surge es: ¿Es eso es lo que nos está llevando a engordar o estamos haciendo más cosas mal? Itziar Digón asegura que no es que estemos haciendo nada mal en concreto. “Lo que parece señalar este estudio y otros similares es que tal vez no todas las grasas sean tan malas como pensábamos. Y también pone en duda la teoría del equilibrio energético para la pérdida de peso: para adelgazar no solo hay que quemar más calorías de las que consumimos. Abren una nueva perspectiva hacia una alimentación en la que se consuman menos hidratos de carbono y no se preste tanta atención a las calorías. Puede ser que muchas de las creencias que tenemos en relación a la alimentación no sean del todo ciertas. Es cuestión de que se vaya sumando evidencia científica”, explica la experta. Sin duda, el tema de la pérdida de peso es un tema complejo y como aseguran los expertos: “no hay fórmulas mágicas” (por más que así lo quisiéramos). Sin embargo, lo que sí parece funcionar para todos es que la actividad física diaria y una dieta con una buena proporción de grasas saludables, hidratos de carbono complejos y proteínas de alto valor biológico (sin descompensar ninguno de estos macronutrientes) es la fórmula del éxito.
¿SIRVE DE ALGO CONTAR LAS CALORÍAS?
Este estudio también cuestiona las teorías del equilibrio energético que afirman que para perder peso hay que quemar más calorías de las que consumimos. Y es que las calorías tiene efectos completamente diferentes en el cuerpo humano y dependen de la calidad del alimento del que provengan. Es decir, no afectan de igual manera al organismo, pudiendo generar desórdenes hormonales que producen sobrepeso.
LA CANTIDAD: ES LA CLAVE DEL ÉXITO
“Come en pequeñas cantidades”. Esta es otra ‘regla de oro’ del estudio. “Hacer tres comidas al día con snacks entre horas no siempre es necesario. Por ello recomendamos comer hasta estar satisfecho y comer solo cuando se tiene hambre. Una persona puede hacer dos comidas al día y un snack, mientras que otra puede hacer una comida grande al día y varios snacks a lo largo del día”, asegura el estudio.
De todo un poco. Lo más recomendado por todos los nutricionistas es comer un poco de todo y no demasiado de nada. siempre que no exista ningún problema metabólico de base. Lo aconsejable es consumir todos los tipos de alimentos en pequeñas raciones para conseguir ingerir la cantidad diaria recomendada de todos los nutrientes que nuestro organismo necesita
Uno de los motivos por lo que afirman esto los expertos que han participado en este estudio –entre los que se encuentran cardiólogos, nutricionistas y psiquiatras– es el hecho de que en Reino Unido se han incrementado considerablemente los índices de obesidad y de personas que padecen diabetes del tipo 2. Y todo ello pese a que se consume una media de 383 calorías menos de las recomendadas y menos cantidad de grasa de la indicada. Motivos que les han llevado a poner en duda la recomendación de la OMS que limita la ingesta diaria de grasa y a poner en jaque al imperio de la comida light y de los alimentos ‘bajos en grasa’ y ‘bajos en colesterol’.
Nuevas recomendaciones
La Public Health Collaboration sugiere eliminar la recomendación de que nuestra ingesta diaria de grasa no supere el 30-35% del total de calorías consumidas. “Las recomendaciones deberían centrarse en los beneficios saludables que tiene comer los alimentos en su forma natural, sin tener en cuenta la cantidad de grasa que contengan”, sugieren unas líneas del informe, en el que se apuesta por una alimentación en la que se consuman menos hidratos de carbono y se preste menos atención a las calorías. Afirmaciones que ponen en duda muchos de los mantras que teníamos asimilados acerca de la pérdida de peso.
La grasa no es el enemigo
Aunque el estudio de Public Health Collaboration asegura que “la grasa no engorda”, se abre un debate desconocido hasta ahora en el mundo de la nutrición. La pregunta es: ¿son tan malas las grasas como pensábamos? Vayamos por partes. A la recomendación de este estudio de obviar la norma de no superar una ingesta diaria del 30% de grasas (cantidad que debe repartirse así: 10% de grasas saturadas, 10-12% de monoinsaturadas y 5-10% de poliinsaturadas) los expertos concluyen que, según un estudio reciente de AECOSAN (Agencia Española de Consumo de Seguridad y Nutrición), los ácidos grasos trans, presentes en los alimentos principalmente por motivos tecnológicos, están asociados con diversos problemas de salud como enfermedad coronaria o diabetes.
A esta conclusión, la experta en nutrición y psicóloga, Itziar Digón asegura en su blog que las grasas saturadas tienen efectos negativos sobre el corazón. Sin embargo, también es cierto, tal y como señala Digón, que no hace falta restringir el 100% de su consumo. “Un 5% de las calorías totales al día pueden provenir de grasas saturadas”, explica la experta. Y es que esa ingesta de grasa diaria debe hacerse, tal y como indican las recomendaciones expertas internacionales, a través de las grasas saludables contenidas en alimentos como sardinas, aguacate, salmón o frutos secos; con aceite de oliva y girasol y con lácteos (que contienen de forma natural grasas saturadas). Pero siempre teniendo presente que la OMS y la American Heart Association recomiendan disminuir el aporte de ácidos grasos transgénicos al 1% del aporte calórico total (unos 2 gr al día para una dieta de 2.000 kcal).
¿Entero o desnatado?
“Evita los ‘alimentos falsos’ todo lo que puedas. En ellas su estado natural ha sido altamente procesado con azúcares, aceites procesados y otros aditivos que no alimentan y que no sacian”, se afirma en este informe, en el que se recomienda evitar el consumo de quesos y yogures bajos en grasa y potenciar el de las versiones “enteras”. Este punto pone en duda otra de las ‘afirmaciones’ que viene siendo centro de atención hace ya un tiempo: la comida light (en exceso) también engorda. Y es que, el hecho de tomar alimentos light no implica que el consumirlos sin control no lleve a un incremento de calorías superior al adecuado. Entonces, ¿es mejor comer un yogur entero que varios desnatados? Pues sí. Para Dijon siempre es mejor comer alimentos en su versión natural, ya que a un alimento light (para que sea ‘light’) se le ha eliminado un 30% de su grasa con respecto al alimento original, pero para hacerlo le han añadido azúcares y otros aditivos para conseguir la textura y el sabor que le gusta al consumidor. Con lo cual, tienen menos cantidad de grasas pero más azúcares añadidos que aportan calorías pero no tienen ningún valor nutricional. Sin embargo, es esencial que las personas con tasas elevadas de colesterol controlen las versiones enteras de lácteos.
¿Lo ‘light’ engorda?
A pesar que lo ‘light’ fue creado para prevenir la obesidad, lo irónico es que, según este estudio, el hecho de haber reducido la ingesta calórica y la cantidad diaria de grasa no parece haber sido una solución a la obesidad, cuyo índice ha aumentado considerablemente en los últimos años, sobre todo en Reino Unido. Para los expertos de este estudio las dietas bajas en grasa son un error. Según ellos, el motivo por el cual la gente sigue engordando está en otros factores como el hecho de comer entre horas, en contar las calorías diarias que tomamos y en el hecho de optar por versiones light y bajas en grasa (que ellos llaman fake foods) en lugar de por alimentos en su versión “natural” (entera). La pregunta que surge es: ¿Es eso es lo que nos está llevando a engordar o estamos haciendo más cosas mal? Itziar Digón asegura que no es que estemos haciendo nada mal en concreto. “Lo que parece señalar este estudio y otros similares es que tal vez no todas las grasas sean tan malas como pensábamos. Y también pone en duda la teoría del equilibrio energético para la pérdida de peso: para adelgazar no solo hay que quemar más calorías de las que consumimos. Abren una nueva perspectiva hacia una alimentación en la que se consuman menos hidratos de carbono y no se preste tanta atención a las calorías. Puede ser que muchas de las creencias que tenemos en relación a la alimentación no sean del todo ciertas. Es cuestión de que se vaya sumando evidencia científica”, explica la experta. Sin duda, el tema de la pérdida de peso es un tema complejo y como aseguran los expertos: “no hay fórmulas mágicas” (por más que así lo quisiéramos). Sin embargo, lo que sí parece funcionar para todos es que la actividad física diaria y una dieta con una buena proporción de grasas saludables, hidratos de carbono complejos y proteínas de alto valor biológico (sin descompensar ninguno de estos macronutrientes) es la fórmula del éxito.
¿SIRVE DE ALGO CONTAR LAS CALORÍAS?
Este estudio también cuestiona las teorías del equilibrio energético que afirman que para perder peso hay que quemar más calorías de las que consumimos. Y es que las calorías tiene efectos completamente diferentes en el cuerpo humano y dependen de la calidad del alimento del que provengan. Es decir, no afectan de igual manera al organismo, pudiendo generar desórdenes hormonales que producen sobrepeso.
LA CANTIDAD: ES LA CLAVE DEL ÉXITO
“Come en pequeñas cantidades”. Esta es otra ‘regla de oro’ del estudio. “Hacer tres comidas al día con snacks entre horas no siempre es necesario. Por ello recomendamos comer hasta estar satisfecho y comer solo cuando se tiene hambre. Una persona puede hacer dos comidas al día y un snack, mientras que otra puede hacer una comida grande al día y varios snacks a lo largo del día”, asegura el estudio.
De todo un poco. Lo más recomendado por todos los nutricionistas es comer un poco de todo y no demasiado de nada. siempre que no exista ningún problema metabólico de base. Lo aconsejable es consumir todos los tipos de alimentos en pequeñas raciones para conseguir ingerir la cantidad diaria recomendada de todos los nutrientes que nuestro organismo necesita
jueves, 8 de septiembre de 2016
Azúcar ¿sí o no?
¿Te atreverías a dejar el azúcar? ¿estarías dispuesto a quitar el toque dulce de tu vida? Si no tienes respuesta hoy te aclaramos si el azúcar es el veneno blanco que algunos comentarios señalan.
Proceso de refinamiento. Según el nutricionista y dietista Edwin López, el azúcar blanco o refinado, aporta más glucosa y fructosa, formando una sacarosa que da un sabor dulce debido al proceso de refinamiento que conlleva. Esto hace que el azúcar normal de la caña pierda muchas propiedades, resalta.
Es esencial en la vida. En el cuerpo humano, el azúcar no es esencial porque el mismo organismo es capaz de generar glucosa. Sin embargo, en situaciones críticas de hipoglicemia o mantenimiento de energía para una dieta normal, se requiere entre un 10 a 12 % de azúcares para evitar las hipoglucemias, de ahí la importancia del azúcar refinado o moreno integral, explica. Es por ello, que el azúcar seguirá siendo parte esencial para la dieta humana y eso significa que no se debe eliminar, enfatiza López.
'OMS'. El azúcar no se puede contemplar como veneno y no provoca enfermedades. No hay que “satanizarla” porque es vital para la dieta humana. En caso de producir enfermedades, será provocado por un exceso de consumo, como pasa con cualquier otro alimento. Inclusive la Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce al 100% el requerimiento energético debe ser entre un 6% y 8 % por azúcares. Y entre un 10% y 12 % de requerimientos por los carbohidratos simples en forma de azúcar.
Se hace mal uso. El azúcar refinada brinda energía, afirma la nutricionista y dietista Magdalena Valdés. Sin embargo, con el pasar del tiempo las personas están haciendo mal uso de su consumo. Si antes se utilizaban dos cucharaditas para endulzar las bebidas, ahora se utilizan seis u ocho cucharaditas. “Todo alimento en exceso provoca alteraciones en el organismo y es mucho más dañino para las personas que son propensas a tener problemas con la diabetes u obesidad”, resalta.
Alternativas. En realidad el problema radica en que las personas ya agregan azúcar a los alimentos o en su caso consumen alimentos o bebidas que tienen altas cantidades de azúcar refinada, que con el tiempo van a desencadenar problemas de salud, señala Valdés. Sobre las alternativas para reemplazar el consumo, la especialista señala que, el azúcar moreno o miel en cantidades que requiere el cuerpo son ideales para el uso diario.
Recomendación
Saludable
El azúcar moreno, la miel, stevia o melaza son productos ideales para endulzar las bebidas o comidas. Se puede optar por el azúcar refinado pero en cantidades moderadas. Asimismo, el uso de edulcorantes debe ser de uso exclusivo para personas que tienen problemas relacionados a la alta cantidad de consumo de azúcar.
Importante
Existen dos tipos de edulcorantes: los calóricos y acalóricos. En los edulcorantes calóricos están: el azúcar de mesa tanto blanco como moreno, la miel, jalea, etc. Los edulcorantes acalóricos, se encuentran en la stevia y sacarosa que aportan entre tres a cuatro calorías por gramos.
Proceso de refinamiento. Según el nutricionista y dietista Edwin López, el azúcar blanco o refinado, aporta más glucosa y fructosa, formando una sacarosa que da un sabor dulce debido al proceso de refinamiento que conlleva. Esto hace que el azúcar normal de la caña pierda muchas propiedades, resalta.
Es esencial en la vida. En el cuerpo humano, el azúcar no es esencial porque el mismo organismo es capaz de generar glucosa. Sin embargo, en situaciones críticas de hipoglicemia o mantenimiento de energía para una dieta normal, se requiere entre un 10 a 12 % de azúcares para evitar las hipoglucemias, de ahí la importancia del azúcar refinado o moreno integral, explica. Es por ello, que el azúcar seguirá siendo parte esencial para la dieta humana y eso significa que no se debe eliminar, enfatiza López.
'OMS'. El azúcar no se puede contemplar como veneno y no provoca enfermedades. No hay que “satanizarla” porque es vital para la dieta humana. En caso de producir enfermedades, será provocado por un exceso de consumo, como pasa con cualquier otro alimento. Inclusive la Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce al 100% el requerimiento energético debe ser entre un 6% y 8 % por azúcares. Y entre un 10% y 12 % de requerimientos por los carbohidratos simples en forma de azúcar.
Se hace mal uso. El azúcar refinada brinda energía, afirma la nutricionista y dietista Magdalena Valdés. Sin embargo, con el pasar del tiempo las personas están haciendo mal uso de su consumo. Si antes se utilizaban dos cucharaditas para endulzar las bebidas, ahora se utilizan seis u ocho cucharaditas. “Todo alimento en exceso provoca alteraciones en el organismo y es mucho más dañino para las personas que son propensas a tener problemas con la diabetes u obesidad”, resalta.
Alternativas. En realidad el problema radica en que las personas ya agregan azúcar a los alimentos o en su caso consumen alimentos o bebidas que tienen altas cantidades de azúcar refinada, que con el tiempo van a desencadenar problemas de salud, señala Valdés. Sobre las alternativas para reemplazar el consumo, la especialista señala que, el azúcar moreno o miel en cantidades que requiere el cuerpo son ideales para el uso diario.
Recomendación
Saludable
El azúcar moreno, la miel, stevia o melaza son productos ideales para endulzar las bebidas o comidas. Se puede optar por el azúcar refinado pero en cantidades moderadas. Asimismo, el uso de edulcorantes debe ser de uso exclusivo para personas que tienen problemas relacionados a la alta cantidad de consumo de azúcar.
Importante
Existen dos tipos de edulcorantes: los calóricos y acalóricos. En los edulcorantes calóricos están: el azúcar de mesa tanto blanco como moreno, la miel, jalea, etc. Los edulcorantes acalóricos, se encuentran en la stevia y sacarosa que aportan entre tres a cuatro calorías por gramos.
lunes, 5 de septiembre de 2016
Dieta mediterránea. Investigadores señalan que deberían recetarla
Sabíamos que comer sano es saludable, ¿pero tanto como para que los médicos, antes de recetar remedios, deban considerar cambios en la dieta como tratamiento para enfermos de corazón? ¿Tanto como para que los servicios de salud subsidien frutas y verduras? Sí. O al menos es la conclusión de un reciente estudio sobre la dieta mediterránea según el cual puede ser más efectiva en algunos casos que los medicamentos para reducir el riesgo de muerte temprana en enfermos del corazón.
Se trata del primer trabajo extenso que estudia el impacto de la dieta mediterránea en la supervivencia de pacientes con problemas cardíacos.
La dieta mediterránea redujo el riesgo de muerte temprana en 37 por ciento, según el estudio.
Investigaciones anteriores, determinaron que tomar sólo estatinas, medicamentos recetados a millones de personas en el mundo para reducir el colesterol, disminuye el mismo riesgo en 18 por ciento.
El estudio evaluó durante siete años a 1.200 pacientes del corazón en Italia que llevaron registros de sus hábitos de alimentación. Durante los siete años, hubo 208 muertes.
La nueva investigación fue presentada en el congreso de la Sociedad Europea de Cardiología, considerado el mayor del mundo sobre enfermedades cardiovasculares.
La dieta mediterránea es el término usado para describir el tipo de alimentación común en esa región, que incluye más pescado que carnes rojas, y es rica en frutas y verduras además de nueces, cereales integrales y aceite de oliva.
"Cambios en la dieta"
"La dieta mediterránea es considerada ampliamente como uno de los hábitos nutricionales más sanos del mundo", dijo uno de los autores del estudio, el profesor Giovanni de Gaetano, jefe del Departamento de Epidemiología y Prevención en el Instituto Neurológico Mediterráneo, IRCCS Neuromed, en Italia.
"Muchos estudios ya habían demostrado que la dieta mediterránea está asociada a menor riesgo de diferentes enfermedades crónicas y muerte".
Los servicios de salud deberían subsidiar las frutas y verduras. "Pero hasta ahora la investigación se había centrado en la población en general, que está compuesta principalmente de gente sana. Nosotros nos preguntamos, ¿qué pasa con aquellos que tienen problemas cardiovasculares? ¿Es la dieta mediterránea óptima para ellos también?", dijo De Gaetano.
El próximo paso será investigar por qué exactamente la dieta mediterránea reduce el riesgo de muerte temprana en personas con problemas cardiovasculares.
"Éste es un estudio observacional (de carácter estadístico y demográfico). Así que no podemos decir que el efecto es causal. Creemos que probablemente la reducción del riesgo se debe a que la dieta impacta factores como la inflamación, pero se necesita hacer más investigaciones", dijo De Gaetano.
DOLORES MUSCULARES
Algunos expertos advierten que muchos pacientes pueden obtener el mayor beneficio si optan por ambas posibilidades, cambios en la dieta y medicamentos.
Si bien algunos pacientes pueden seguir requiriendo estatinas, una dieta mediterránea puede hacer que las dosis sean menores, reduciendo efectos secundarios como los dolores musculares. Se estima que sólo en Estados Unidos, cerca de 30 millones de personas toman estatinas.
Jeremy Pearson, director asociado de la Fundación Británica del Corazón, British Heart Foundation, dijo que es muy bueno saber "que aun si uno tiene antecedentes de enfermedades cardiovasculares, seguir una dieta mediterránea reduce el riesgo de muerte".
"Mantener un estilo de vida saludable, aun si alguien ha tenido un ataque al corazón o un accidente cerebrovascular, continúa teniendo beneficios", agregó Pearson.
Cautela Jules Payne, director de la organización no gubernamental Heart UK, dijo que los resultados del estudio deben analizarse con cautela.
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