¿Recuerda las resoluciones que hizo en enero? Si es como la mayoría de las personas, probablemente haya jurado comer mejor, hacer más actividad física– y quizás usar el hilo dental más seguido. Después de un par de meses, ¿cómo le está yendo? ¿Ya volvió a sus viejos hábitos?
Bueno, no es el único. Como aproximadamente el 80% de las resoluciones fracasan antes de febrero, no sería sorprendente que se encuentre en esta situación. Pero esto no significa que no pueda tener éxito.
Con frecuencia, las personas establecen sus propias resoluciones con las mejores intenciones de realizar cambios positivos en sus vidas. Pero a menudo les sucede que las restricciones que se imponen no son sostenibles.
A continuación, se enumeran algunas ideas para ayudarlo a recalcular estas resoluciones.
Reestablecer sus resoluciones
• Establezca objetivos realistas y específicos de los cambios que planea realizar, en lugar de decir “voy a llevar el almuerzo al trabajo más seguido”, diga “voy a llevar el almuerzo al trabajo dos veces por semana”. De esta manera, al final de la semana, es fácil determinar si cumplió con su objetivo o no.• Para lograr sus objetivos, tiene que identificar los obstáculos que se interponen para lograr el éxito y superarlos. Por ejemplo, si determina que sale a comer bastante seguido porque es fácil y rápido, propóngase hacerse tiempo a la noche o los fines de semana para planificar y preparar las comidas de la semana.
• Realizar pequeños cambios en cómo hace las cosas todos los días realmente suma. Por ejemplo, comer una fruta de postre en lugar de helado todas las noches podría hacerlo ahorrar las calorías suficientes como para bajar 4 kilos en un año y es tan solo un cambio relativamente pequeño. Puede seguir construyendo en base a estos pequeños éxitos durante todo el año.
• Lleva tiempo corregir un mal hábito, por eso la repetición es tan importante. Pero es mucho más fácil repetir una tarea pequeña, relativamente fácil, que una que parece definitivamente imposible.
Si su resolución, como ocurre con la mayoría de las personas, es comer más saludable, a continuación, le presento algunos consejos para hacer compras saludables de manera inteligente.
1. Lea la Información Nutricional.
La Información Nutricional en los envases es una de las mejores herramientas para ayudarlo a elegir alimentos nutritivos y comparar diferentes productos. Puede considerar factores como calorías, grasas, proteínas y contenido de azúcar de las distintas marcas, que lo ayudará a hacer elecciones más inteligentes. Comprender la etiqueta de un alimento puede ser difícil. Investigar un poco los términos incluidos en la etiqueta de un alimento puede ayudarlo a saber qué buscar.2. Haga que sus alimentos básicos diarios sean lo más saludable posible.
Cambiar a la versión con menor contenido graso de los alimentos que consume con frecuencia, como aderezos, productos untables, lácteos e incluso postres, puede ayudarlo a reducir muchas calorías. Una taza de leche entera tiene 150 calorías y aproximadamente 7 gramos de grasa; la leche descremada tiene 90 calorías y nada de grasa.Reemplazar la carne picada común por pechuga de pavo picada puede reducir aproximadamente 10 gramos de grasa y 100 calorías por porción de 85 gramos.
Si compra yogur natural y le agrega fruta y edulcorante ingerirá menos calorías y mucho menos azúcar que si elige la variedad ya endulzada.
Incorpore más proteínas vegetales y reemplace almidones refinados por cereales integrales. Pruebe arroz integral, pastas integrales, pan y galletitas integrales, cuscús integral, quínoa y avena en lugar de panes, cereales, pastas y granos “blancos” altamente refinados.
3. Considere los productos de estación.
Cuando se trata de productos frescos, por lo general, los productos de estación son más frescos, conservan más nutrientes y son más económicos que los productos fuera de estación. Si tiene una feria de productores cerca, posiblemente los productos sean más frescos que en el supermercado, es decir, las verduras no se marchitarán tan rápido y los alimentos conservarán su valor nutricional. Además, es más probable que encuentre nuevas variedades de frutas y verduras para probar. Esto lo ayudará con el siguiente consejo…4. Pruebe nuevas frutas y verduras una vez por semana.
Si no está preparado para incorporar un alimento completamente nuevo, puede comenzar de a poco con una variedad diferente u otro tipo de un alimento conocido. Todas las frutas y verduras son únicas en cuanto a los fitonutrientes saludables que aportan, por eso la variedad es realmente importante para gozar de buena salud. Si siempre prepara la ensalada con lechuga iceberg, remplácela por lechuga romana verde o espinaca. Pruebe una nueva variedad de col o manzana, o prepare coliflor morado en lugar del blanco que generalmente hace.5. Encuentre la manera de incorporar más pescado a su dieta.
El atún o salmón enlatado son capturados en estado salvaje y son ricos en grasas omega 3; además son prácticos y accesibles. Agregue atún enlatado a la salsa de las pastas en lugar de carne picada o agregue un poco de salmón enlatado a la ensalada para armar un plato principal rápido, saludable y liviano.Una vez que esté bien abastecido de ingredientes saludables en casa, puede empezar a pensar en qué cambios realizar cuando cocina.