jueves, 11 de diciembre de 2014

Damasco. Este alimento llega con cinco beneficios para tu salud.

E l damasco es un fruto pulposo que no tiene nada que envidiar a otras frutas. La suavidad de su piel es una de sus principales características al momento de reconocerlo, pero sobretodo se destaca por ser rico en vitamina A, comentó la nutricionista Magdalena Valdés.

Para una piel impecable. En este sentido, Magdalena explicó que al tener esta vitamina, ayuda a la regeneración de la piel, por lo cual actúa como un antioxidante natural, mejorando su aspecto de adentro hacia afuera.

No solo tiene vitaminas y minerales. A diferencia del durazno, es menos ácido y contiene bastante propiedades. Es pulposo e hidratante, por lo cual se puede utilizar en diferentes preparaciones.

Se asimila fácilmente. El nutricionista, Edwin López, mencionó que a diferencia del durazno tradicional (debido a que son parecidos) este tiene bastante fibra soluble lo cual hace que la digestión sea más fácil.
para la hipertensión. También es conocido por su alto contenido en potasio, resaltó Edwin, lo que contribuye para la buena diuresis y regular la frecuencia cardíaca en caso de hipertensión.

Relajante natural. Otro factor a destacar es su efecto para relajar, actuando sobre el sistema nervioso, por lo que está indicado para aquellas personas que sufren de estrés o tensiones.

Para tomar en cuenta. Respecto a quiénes pueden consumir este fruto, López resaltó que todas las personas que no tengan problemas de alergia a la composición del damasco pueden disfrutar de su delicioso sabor en porciones moderadas y naturales, aunque también se puede consumir en mermeladas siempre y cuando sea una preparación artesanal.

Receta
Clafoutis de damasco
Ingredientes

• 100 cc de leche
• 100 cc de crema de leche
• 115 gr de azúcar
• 1 cucharadita de aceite de maíz
• 12 damasco maduros
• 3 huevos
• 60 g de harina
• 1 pizca de sal

Preparación
Lavar y sacar la pulpa de los damascos, luego cortarlos en tiras y colocarlos en una fuente.

En un bol, batir la harina con el azúcar y la sal. Incorporar los huevos uno a la vez, la leche y la crema de leche, logrando una crema suave y homogénea. En un molde para el horno agregar los damasco cortados en tira y agregar la preparación. Precalentar el horno a 180 grados centígrados. Llevar la preparación al horno por 45 minutos.

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