Las frutas y verduras son la alternativa para los celiacos

El cambiar la dieta alimentaria y privarse de consumir cereales con gluten puede parecer algo drástico para algunas personas. Pero los enfermos celiacos no tienen otra alternativa, porque su intolerancia a estos productos puede complicar su estado de salud. Una de las alternativas que les queda es nutrirse de frutas y verduras.

La enfermedad celíaca es considerada para la Organización Mundial de la Salud (OMS), un problema de salud pública que aumenta y que forma parte de la intolerancia de alimentos más frecuentes en el mundo.
En la actualidad, el mayor problema de esta enfermedad es que se encuentra infradiagnosticada, es decir que una de cada 100 personas la padece y no lo sabe.
Lo cierto es que este mal de origen genético también está presente en Tarija, aunque los médicos especialistas la minimizan al señalar que el número de personas que la padecen no es “muy” significativo, y que es una enfermedad rara.
Para la gastroenteróloga del Caja Nacional de Salud (CNS), Rocío Giménez, este mal surge porque el organismo pierde la capacidad de absorber los nutrientes de los alimentos que se ingiere, debido a cambios en la estructura y función del intestino delgado.
Los productos a los que son intolerantes estas personas son los cereales con gluten y sus derivados como: trigo, avena, cebada y centeno, porque la calidad nutricional de los productos (que consume) baja mucho, entonces el paciente entra en una situación de deficiencia nutricional y no es ideal para los que padecen de esta enfermedad.
La responsable del Programa de Nutrición del Servicio Departamental de Salud (Sedes), Giovanna Soruco, explicó el gluten es la proteína de los cereales, que generalmente son los carbohidratos que dan energía, y que el organismo de las personas los necesitan.
Pero los celiacos son intolerantes al gluten, por lo que demanda elaborar un esquema de nutrición para éstas personas, el cual será acorde a la edad y al organismo de cada individuo. La dieta debe ser estricta y para toda la vida, en la que se tiene que introducir alimentos que reemplacen los nutrientes del gluten, tales como las verduras y frutas.
Una manzana mediana contiene 4 gramos (gr) de fibra, las peras de tamaño mediano, con 6 gr; la naranja, la cual tiene 4 gr; los plátanos, que contienen 3 gr; las moras, con 4 gr de fibra por porción de 1 taza; y las frambuesas, que tienen 8 gramos de fibra por porción de 1 taza.
Algunas verduras con el contenido más alto de fibra son: las alcachofas, con 10 gr; las espinacas, que tienen 4 gr de fibra por porción de 1 taza; el camote, que tiene 5 gr; el brócoli, también con 5 gr por 1 taza de ración; y las zanahorias, que tienen 5 gr de fibra por cada porción de 1 taza.

Recomiendan no iniciar la dieta previa a una biopsia

La Federación de Asociaciones de Celiacos recomiendan no iniciar una dieta sin gluten de sin haber realizado previamente una biopsia intestinal que demuestre la intolerancia a esa proteína, por la alteración de la mucosa. Indican que la prescripción de esa dieta, sólo porque hay sospecha de intolerancia a esta proteína o por resultado positivo en la prueba de anticuerpos específicos, sin haberse realizado una biopsia intestinal que lo confirme puede ser un error.
La responsable del Programa de Nutrición del Sedes, Giovanna Soruco, indicó que el no diagnosticar a tiempo este mal, puede derivar en desnutrición, porque la persona no podrá aprovechar los macro y micronutrientes que normalmente come. Además que este problema es genético y después se convierte en inmunitario y a nivel células. Los síntomas que presenta una persona con esta enfermedad son diarrea y distención del estómago a causa del consumo de productos con gluten.